-El centauro de la arena-
«Ummm… reaaalmente va a hacer esto?»
Era una habitación pequeña.
Dividida con una cortina de tela gruesa, el interior era un blanco estéril.
Todo desde las sabanas hasta la misma cama estaban apropiadamente preparadas, la habitación desbordaba un aire de limpieza.
Dentro, un hombre y una mujer mirándose de frente.
La mujer ya se había quitado sus prendas de la cintura para arriba. Lo único que vestía era su sujetador de cuero de vaca; sus manos cubrían su voluptuoso cuerpo.
Con sus redondos atributos y su hermosa figura, una extraña atmosfera se había prendido en el aire de la estrecha habitación.
Ella se veía angustiada. El hombre le habló gentilmente.
«Si. Voy a necesitar su ayuda para completar el tratamiento».
«Peeeero realmente es vengonzoooooso…»
La mujer tenía una lenta y alargada forma de hablar, pero su ansiedad podía distinguirse en su voz.
«Si madame, pero esto es algo que todos tienen que hacer».
«Peeero mi espooooso…»
«Si puedo terminar esto apropiadamente, entonces estoy seguro de que su esposo no estará tan preocupado».
La mujer lo pensó unas cuantas veces por un momento, pero finalmente parecía aceptarlo y bajó sus brazos, exponiendo su pecho. La manera en que bajó sus ojos dio la impresión de que seguía un poco asustada.
«Um, si es posible, por favor sea geeeentil»:
«Por favor no se preocupe, no dolerá».
El hombre, actuando tan calmado como podía, extendió su mano directamente al gran pecho de la mujer. Levantó un enorme y pesado seno mientras lo tocaba.
«Ah…!»
«A-acaso le hice daño?!»
«E-esta biiiien… solo me sorprendió un pooooco».
«En ese caso voy a continuar, está bien?»
El hombre se veía absolutamente serio mientras empezó a tocar a fondo a la mujer.
«Unh, ah! Ahí, duele!»
«Lo siento, por favor trate de soportarlo un poco más».
«Uhn… ah! Hah…»
Su fuerte respiración empezó a sonar como si estuviera jadeando en placer, y a su vez, tolerando una dolorosa examinación.
El hombre masajeó su pecho aún más y parecía estar comprobando las reacciones de la mujer.
«L-lo siento, por favor perdóneme. Veamos aquí, duele?»
El hombre se disculpó, pero sus manos no pararon. Del mismo modo, mientras lucia nervioso, el continuaba observando a la mujer como debía.
«Ah, no! ¡Eso es… Hunh!»
Presionando su mano en su boca, la mujer desesperadamente trató de resistir el dolor sin dejar escapar su voz.
El hombre observaba de cerca su condición mientras ella seguía aguantando.
Por fin, había acabo, él retiró sus manos.
La ropa interior de cuero de vaca que estaba usando la mujer parecía estar diseñada para alguien mucho más pequeña y se había deslizado hacia abajo, dejando las puntas de su pecho al descubierto.
Su respiración seguía fuerte y pesada, la mujer acomodó sus prendas. Se puso su ropa de algodón sobre su ropa interior, pero sus mejillas seguían sonrojadas.
Incluso estando vestida, la atmosfera de la habitación permaneció extraña e incierta.
«Ahora, entonces…»
El hombre cambió su atención hacia la cara de la mujer. Sobresaliendo de su cabello rubio habían unos largos y curvos cuernos además de un par de puntiagudas orejas de vaca.
«Lo siguiente son sus orejas».
«M-mis ooorejaaas? Pero uuum, ya terminó con mi peeecho?»
«Si, gracias. Lo siguiente, voy a necesitar que me muestre sus orejas»
«Mi ooorejaaas? Peeeero ellas están un poco sensibles, asiiii queee…»
La mujer evitaba contacto visual, luciendo insegura. Sus orejas se movían nerviosamente respondiendo a su malestar.
Su piel era tan delgada que incluso los vasos sanguíneos eran visibles. Tenían un parecido sorprendente a las orejas de una vaca normal y demostraba fuertemente que ella no era humana.
«Eso yyyy… mi espoooooso…»
«Si, entiendo. Sin embargo, creo que pasar por todo esto es la mejor manera de calmar las preocupaciones de su esposo»
«Uuungh…»
Por un momento, la joven esposa dudó, sus orejas palpitaban y temblaban.
Sin embargo, parecía que ella se había preparado así misma, de repente giró su cabeza hacia el hombre.
Ella presentó sus energéticas orejas y curvados cuernos hacia él.
«P-por favoooooor»
«Ok, entonces por favor tenga paciencia conmigo un momento…»
Las palabras del hombre eran educadas, pero el lucia tenso. Mientras sintió las orejas, su cara fue aún más rígida que cuando estaba tocando su pecho.
«Nnnh!»
La mujer dejó salir un ruido.
El llanto era muy diferente del que tenía cuando sus senos eran tocados, a tal punto que el hombre instintivamente alejó las manos de ahi.
«L-lo siento, está bien?»
«Estoy biiien. Es sooolo, la estimulación fue un pooooco fueeeeerte…»
«Lo siento, pero es necesario. Puedo continuar?»
«T-trataré de aguaaaaantar»
El hombre tocó de nuevo las orejas de la mujer.
«Un…hnh!»
Acercó su cara a sus visibles vasos sanguíneos, examinándolos minuciosamente. Aunque el hombre estuvo tocando el cuerpo de la mujer por algún tiempo, todavía prestaba mucha atención a sus reacciones.
«Ah… hnh!»
«S-si duele, por favor dígame»
«No es así…. Duele, peeero… ah, hah, ahnh! Lo siiiiento, cariiiiño…»
El hombre pensó que la mujer misma no entendía porque se estaba disculpando.
Ella llamaba por su ausente esposo.
Sin embargo, continuó examinando sus orejas, ignorando deliberadamente lo que ella decía. Las estiraba de arriba a abajo y colocó una luz a través de ellas, pero si alguien los hubiese estado viendo, habrían tenido dificultades para averiguar exactamente qué es lo que estaba pasando.
«Nh! Unh… hnh!»
«P-perdóneme, lo siento tanto. Por favor solo aguante un poco más»
«N-no puedo soportarlo… estoy… no pueeeeeeeeeedo!»
Entonces, finalmente.
«Unnnnnnnhhhhhh!»
La mujer realizó un exagerado salto al aire. Sus hombros se contrajeron y convulsionaron, ella trataba desesperadamente de cubrir los gemidos de éxtasis que amenazaban con salir.
«E-está bien…?»
El hombre no pudo evitar sentirse nervioso dada la reacción extrema de la mujer.
Por un momento, ella solo podía respirar fuertemente, pero más temprano que tarde, ella miró al hombre con ojos húmedos.
Su mirada hacia arriba fue suficiente para hacer que el corazón del cualquiera se llenara con sentimientos hacia ella.
«E-estoy biiiien. Así que, umm…»
«Oh, sí. Gracias por quedarse durante la examinación. He encontrado la fuente del dolor»
«De veeeeerdad? Eso es buuuuueno, pero ummmm…»
La mujer la dio una vista rápida de reojo al hombre.
«Usted es un dooooctor después de todo, así que, puede conducir la examinación de una manera más diiiigna? Es vergonzoso para mi si usted esta tan…nervioso»
Sus palabras golpearon al hombre -Glenn Litbeit- como una daga.
«…Estoy avergonzado de mi comportamiento, por favor perdóneme»
Frente a las quejas de la mujer, con el ceño fruncido, todo lo que él pudo hacer fue bajar su cabeza en arrepentimiento.
Esta era una clínica cuya especialidad era el tratamiento de monstruos.
Como un doctor especializado en examinar pacientes no-humanos, era el lugar de trabajo de Glenn Litbeit y se tomaba su trabajo extremadamente en serio.
* * *
Una presión en el pecho, con dolor.
Algunos días, el dolor era lo suficientemente fuerte que hacía difícil la simple acción de caminar.
Experimentando ese problema en el pecho, la joven esposa minotauro -Silsha Tessius- había llegado a la clínica, casi era el momento en que su consulta se terminaría.
Los minotauros son una especie de monstruos que tienen muchas características distintivas similares a un ganado. Los machos minotauros tienen cabezas exactamente como las de unos toros. Su cuerpo era generalmente alto y musculoso.
Las hembras minotauro tenían caras parecidas a las humanas, pero sus cuernos y orejas eran parecidas a las de unas vacas, era conocido que muchas de ellas desarrollaban un gran busto.
Glenn concentrado en la examinación de orejas y pechos de su paciente. Palpitando sus senos, fue capaz de concluir que ella no tenía bultos o tumores.
Por otro lado, sus orejas se habían enrojecido y alargado, además estaban un poco inflamadas.
Glenn creía que esa hinchazón era la causa de la sensibilidad de sus orejas. Las orejas de una minotauro, enrojecidas e inflamadas eran síntomas de una sola posible condición.
Llamada:
«Estas embarazada»
Por las tranquilas palabras de la asistente de Glenn, la pareja Tessius, sentados juntos ahora que el esposo de Silsha había entrado a la habitación, quedaron atónitos.
Cuando su esposa empezó a experimentar dolor, el esposo saltó de peor en peor conclusión preocupado de que fuera una señal de una enfermedad más grave, así que el resultado de su examinación fue un gran alivio para la pareja recién casada.
«El dolor en el pecho es síntoma de embarazo. Felicitaciones»
La asistente de Glenn, Saphentite, dio sus bendiciones con una sonrisa en su rostro.
Con su piel blanca y ojos rojos, Saphentite Neikes daba una fría e indiferente primera impresión, pero después de ver su gentil y amable sonrisa, se volvió inmediatamente claro que su apariencia hostil era un engaño.
Ella era una lamia, y una excelente asistente. Mientras hablaba con la pareja, movía su cola de un lado para otro, completando pequeñas tareas que se le habían asignado.
«Será necesario realizar un seguimiento, pero la molestia en el pecho debería desaparecer pronto. Si hay momento en que el dolor sea verdaderamente insoportable, por favor ponga a hervir esta hierba y beba la infusión»

La medicina colocada en un trozo de tela fue mezclada por Saphentite con hierbas del jardín. Ella tiene profundos conocimientos farmacéuticos y supervisa la entrega de prescripciones en la clínica.
Saphentite no podía decir si la pareja Tessius la estaba escuchando realmente mientras se abrazaban y compartían su alegría.
Glenn también estaba feliz de cerrar el caso sin condenar a alguien a una enfermedad seria.
Glenn y Saphentite despidieron a la pareja que tomaban la medicina y salían de la clínica. Con las buenas noticias en sus corazones, la joven pareja minotauro eran todo sonrisas mientras se desvanecían a la vista.
«Voy a voltear el letrero, Doctor»
Dicho eso, Saphentite giró el letrero de la entrada hacia “Cerrado”, no había más pacientes que tratar, así que su trabajo por el día había acabado.
Glenn empezó a limpiar el cuarto de examinación. Esta pequeña sección estaba separada con una cortina, pero la clínica en general era razonablemente espaciosa.
Aún más importante, ya que era usado para tratamientos médicos, la limpieza y la esterilización, era un trabajo importante. Francamente, era más de lo que ellos dos podían manejar.
Y así…
«Tiempo de ordenar todo!»
«Hora de limpiar!»
Suavemente corriendo por el suelo había un grupo de hadas que los ayudaban.
Las hadas eran empleadas por la clínica, y eran pagadas con una cuota de porción de leche por día de trabajo. No importaba cuanto lo intentaran, Glenn y Saphentite no podían manejar todo ellos solos, así que contrataron a las hadas para que se encargaran de la rutina de las tareas diarias.
Los pequeños seres no podían asistir personalmente con ningún tratamiento médico, pero eran invaluables cuando se trataba de varios quehaceres, eran un conveniente grupo para tener alrededor.
Ahora que ella y Glenn han terminado con la pareja, Saphentite soltó un suspiro, aliviada de que el trabajo de ese día había terminado.
La asistente era un monstruo cubierto con escamas blancas. Siendo una lamia, su parte baja se asemejaba a una serpiente y tenía un brillo encantador.
Una albina, su piel era blanca, tenía ojos rojos que relucían como rubíes y junto a su cabello plateado, emanaba una misteriosa figura, pero al trabajar en una clínica, su hermoso rostro le hacía parecer la persona indicada para el trabajo.
En una rigurosa inspección, un tono de color rosado y purpura puede ser visto brillando entre sus blancas escamas. Era un extraño tinte que solo servía para incrementar el aura enigmática de Saphentite.
Ella ha estado trabajando en la clínica de Glenn desde que fue abierta, ella era una persona capaz e indispensable para él.
«Gracias por su gran trabajo, Doctora»
Él dijo, expresando su gratitud.
«Oh, si…»
Glenn sintió algo punzante en sus palabras de reconocimiento.
Saphentite también empezó a limpiar, poniendo de un lado el papeleo y los suministros médicos con su cuerpo de serpiente. Su destreza era impresionante como siempre y el funcionamiento de la clínica sería muy duro sin ella.
Sin embargo… los ojos rojos de Saphentite no estaban mirando a Glenn, sino hacia algo en la distancia.
Glenn ha estado con Saphentite por mucho tiempo y siempre podía sentir cuanto ella no estaba de humor.
«Um… sucede algo, Spahentite?»
«No, Doctor. Realmente nada en particular»
Saphentite extendió su deslizante cola y tomó un paquete de hierbas que Glenn sostenía. Estaba claramente molesta.
«Pero…?»
«No estoy molesta, en lo más mínimo»
Su cabello plateado era casi transparente. A través de él, Glenn pudo ver la mirada que tenía. Sus vivos ojos rojos lo atravesaron como espadas.
«Así es… Doctor. Incluso si escucho voces obscenas que suenan como un hombre y una mujer haciendo el amor desde el cuarto de examinación, e incluso si durante la “examinación” el doctor toca a la paciente en una miserable y desvergonzada manera, no me da razones para estar enojada. De hecho, solo estoy preocupada acerca del futuro de la clínica, eso es todo»
«Eso fue… ummm… lo siento…»
«Si hay algo de lo que disculparse, sería mejor que se comportara de manera más apropiada de ahora en adelante»
La mirada de Saphentite era fría como el hielo. Todo lo que él había hecho fue parte del tratamiento médico de la paciente, así que Glenn no debería tener nada de qué avergonzarse, pero…
«Honestamente, si así es como van a ser las cosas, entonces no había razón en dejar a esa Octo-muje… Disculpe… no había razón en dejar a la señorita Cthulhy en primer lugar. Si, contamos con su ayuda al principio, pero esta es la clínica del Dr. Glenn. Por favor sea consciente de que necesita ser un doctor en el que todos puedan confiar»
«T-tienes razón. Realmente lo siento»
Incluso en momentos como este, ellos seguían en su papel de doctor y asistente, pero originalmente, ambos habían sido estudiantes en la academia.
Estudiantes de la profesora de medicina, Cthulhy Squele, los dos alcanzaron buenas notas en sus respectivos campos. Sus instructores también tomaron una gran parte en ayudarlos a abrir su clínica en la ciudad de Lindworm.
Saphentite fue la primera estudiante de Cthulhy, y como tal, era un pupilo de mayor grado comparado con Glenn.
Ambos operaban la clínica juntos, pero en realidad, no existían prácticamente cambios en la dinámica de poder de su relación. Glenn era a menudo regañado y sermoneado por Saphentite.
«Como humano, Doctor, es el único que puede examinar y tratar monstruos, sabe»
«Si… lo sé. Me esforzaré»
Glenn asintió. Él tenía 17 años de edad y mientras su tímida personalidad lo hacía lucir aún más joven, tenía excepcionales logros personales a su nombre.
Aunque era originario de la metrópolis principal dentro del territorio humano, en la frontera oriental del continente, todavía tenía interés en las criaturas.
Dado su extraordinaria pasión por el tema, fue transferido a una academia de monstruos. Ahí él estudió bajo la autoridad de la ciencia médica de monstruos, Cthulhy Squele.
Incluso entre los brillantes, talentosos chicos y chicas que Cthulhy había recogido a lo largo del continente, Glenn demostró ser una promesa.
Saphentite tomó su orgullo en su genialidad por los estudios farmacéuticos, pero Glenn Lietbit estaba una cabeza por encima de ella.
No solo existían los que tenían forma de largo alcance, la ecología detrás de ellos era extremadamente variada y diversa.
Todos eran clasificados como “Monstruos”, pero, aunque compartían la misma etiqueta, entre lamias y minotauros estaban aquellos cuyos cuerpos eran tan diferentes que prácticamente se podía decir que eran completamente de otras especies.
Del mismo modo, las enfermedades que enfrentaban eran igual de distintas.
Tratando y examinando solo la raza de los humanos, se necesita una cantidad enorme de conocimiento. Glenn, sin embargo, no solo examinaba varias especies de monstros, también estaba preparado para proveer tratamiento y realizar cirugías en pacientes cuando fuese necesario.
En un pueblo donde humanos y monstruos Vivian juntos como Lindworm, se podría decir que él era un talento indispensable para tener a disposición, pero…
«A partir de ahora, me aseguraré de hacer bien las cosas»
«Por supuesto. Mañana es la examinación de salud en la arena. Este es un trabajo muy importante que la señorita Cthulhy nos impus… nos confió. Así que no importa qué, necesita soportarlo hasta el final»
«Así es… entiendo, me aseguraré de hacer un buen trabajo»
Desafortunadamente, Glenn no podía hacer nada siendo un novato con tan poca experiencia de vida. Era un chico tímido de poca confianza, lo suficiente que fue natural para su asistente Saphentite preocuparse por él.
Con eso dicho, era realmente muy capaz; desde que la clínica abrió, ha dado incontables consultas a monstruos viviendo en la ciudad y diagnosticando sus desordenes y enfermedades.
El mayor problema era que el mismo Glenn todavía no era capaz de hacer frente a este hecho.
«Una cosa más, Dr. Glenn»
«Si?»
«Lo he dicho muchas veces, pero por favor no me llame Saphentite. Dígame Sapphe, como cuando estábamos en la academia»
Sea para esconder su vergüenza o por alguna otra razón, su cola se movía de un lado para otro.
Mientras Glenn solía referirse a ella de esa manera, desde que la clínica se inauguró el usa términos más formales, en orden para dejar claro sus posiciones como doctor y asistente.
Sin embargo, a Saphentite siempre le ha disgustado ser llamada de ese modo. En el fondo, parecía que esta era la razón primordial de su enojo el día de hoy.
De cualquier forma, ella nunca ha dejado de referirse a Glenn como «Doctor», con lo cual, el sentía que no era justo.
Por encima de eso, él no quería ser llamado «Doctor» por una mujer que fuese su senpai, pero Saphentite no mostraba indicaciones de que iba a realizar ese cambio.
«Entiendo, Sapphe»
«Ahí lo tienes. Ahora, Doctor, deberíamos prepararnos para mañana?»
Ahora que miraba directamente a Glenn, el vio que su excepcional asistente estaba sonriendo. Sus expresiones seguían un poco rígidas, pero mucho más suaves de lo que habían sido hasta ahora.
«Preparaciones!»
«Ayuda!»
«Donde esta nuestra leche?»
Las hadas estaban por todo el lugar, batiendo sus pequeñas alas. El precio por sus servicios era barato, pero por esa razón ellos eran muy estrictos cuando se trataba de cumplir el contrato.
Si ellos fuesen obligados a trabajar más de lo que se había acordado, estarían furiosos. Esas fueron sus condiciones.
«He preparado la leche para ustedes. Ahora, solo queda una cosa más por hacer»
«Ok»
Dijeron las hadas. Glenn había respondido también, su voz mezclada con la de las hadas.
En la ciudad de Lindworm, donde habían pocas personas capaces de diagnosticar y tratar monstruos, la clínica Litbeit había terminado otro ajetreado día.
* * *
Había una vez, hace cientos de años, una gran guerra.
Las montañas Vivre cortaban a través del continente, sirviendo de frontera entre los humanos y monstruos que libraban una guerra entre ellos.
Los humanos peleaban con superioridad numérica y tecnológica, además de un buen liderazgo para comandarlo todo.
Los monstruos, aunque con menores números, abrumaron a los humanos con su diverso rango de habilidades e ingeniosas estrategias. Los humanos fueron incapaces de lidiar con ellas a medida que se las iban encontrando en batalla.
¿Por qué exactamente inició la guerra? La causa de la disputa fue olvidada en el caos de la historia. Había un número de explicaciones plausibles, pero ninguna de ella tenía suficiente evidencia para sustentarse.
Lo cierto era, que la lucha trajo más lucha y se convirtió en una espiral, un remolino de calamidad por ambas partes.
Comenzó con una enorme batalla, dos masivas fuerzas militares confrontándose cabeza a cabeza en una vasta pradera.
Pero la larga y continua guerra constantemente empezó a drenar de las personas su voluntad de luchar.
Rencores permanecieron sobre las muertes de familiares y seres queridos, pero mientras la escala de la guerra iba gradualmente decreciendo, también lo hacían la cantidad de personas que sentían tal dolor y albergaban tales sentimientos.
Por encima de eso, a medida que se alargaba la batalla, crecía el miedo en los monarcas y generales de cada ejercito por haber perdido de vista la victoria.
Cuando la larga guerra llegaba a sus episodios finales, las únicas batallas que salían ocasionalmente eran pequeñas escaramuzas en áreas remotas, que ni siquiera sufrieron de alguna baja.
Al final, los humanos y los monstruos formaron un acuerdo de alto al fuego con la condición de que no se invadiría ninguno de los territorios.
De eso, han pasado 10 años.
«Quiero decir… no había realmente una razón para mantener la guerra de cualquier forma»
Glenn murmuró mientras se mecía en su carruaje, observando la vista de la ciudad.
Desde el lugar, podía ver la escena en el mercado. Un humano vendedor de fruta vendiendo unas manzanas a unos lamia pequeños. Un ciclope artesano captó la atención de una joven ama de casa y le presentó sus mercancías, demostrando lo afilado de sus cuchillos de cocina.
Este pueblo donde humanos y monstruos vivían juntos era donde Glenn trabajaba como doctor, Lindworm.
Ubicado al pie de las montañas Vivre, fue una vez una prospera y fortificada ciudad en el territorio humano.
Incluso ahora, después del cese al fuego, generalmente los monstruos viven en su lado de la ciudad y los humanos en el suyo.
Fue difícil ser la única ciudad donde humanos y monstruos coexistían juntos pacíficamente, como si tal armonía fuese normal.
«Que le hizo pensar en ese tema tan de repente?»
Preguntó Sapphe
«Oh, no fue nada. Solo pensaba en como ahora la paz está aquí y la guerra se acabó, todo tipo de personas viviendo juntas. Eso es todo»
Como doctor especializado en medicina de monstruos, Glenn estaba francamente complacido por la paz que tenía que llegar. De hecho, el carruaje en el que Glenn estaba en ese preciso instante fue un símbolo de esa paz.
Había un emblema de dos espadas cruzadas pintada en uno de los lados del carro, el emblema de la Compañía de Transporte Scythia.
La familia Scythia era una prestigiosa familia de centauros, en palabras más precisas, lo que Glenn estaba montando era un carruaje arrastrado por un centauro.
«Cómo va el viaje en nuestro carruaje, Doc?»
«Es muy cómodo, gracias»
«Así es, es grandioso, cierto?»
Actuando ambos como caballo de carga y conductor, el centauro soltó una carcajada mientras halaba el carro.
Glenn pensó para sí mismo que esta debe ser una buena vida para un centauro actualmente.
Los monstruos equinos que eran bien conocidos como mercenarios, que, cabalgando a través de los pastizales para la batalla, eran ahora conductores de carruaje.
Su nueva ocupación en la compañía de transporte fue, para ellos, algo perfecto dada sus habilidades.
«No todo se ha resuelto para bien, sabe, Dr. Glenn»
Dijo Sapphe, sacando la cabeza del carruaje.
«Puede ver la arena ahora»
Añadió
«La arena?»
Glenn reflexionó.
«Durante la guerra era usada para ejecutar prisioneros de guerra, cierto?»
«Si. Combinaban entretenimiento y ejecuciones públicas, era el lugar donde los prisioneros eran forzados a matar animales, o incluso otros miembros de su especie. Todo porque Lindworm era una fortaleza humana en la línea frontal del territorio humano»
Sapphe tenía algo parecido a una expresión dolorosa. Los prisioneros de guerra que estaban aquí eran monstruos, lo que quiere decir que seguramente habían otras lamias entre esos que murieron.
«Pero la guerra terminó»
Ella continuó
«Y la razón de la existencia de Lindworm, no solo de la arena, fue cuestionada»
Con la batalla acabada, los lugares usados en la guerra ya habían servido a su propósito, por lo que se volvieron innecesarios junto con todo Lindworm. Las tropas estacionadas empezaron a partir, pusieron de repente en apuros a los comerciantes y encargados de tiendas.
Habían muchas personas que vendían comida, platos y otras necesidades diarias a los soldados. Los prisioneros de guerra en la arena fueron también colocados en una posición difícil. Incluso si regresaban a su territorio, como soldados, ya no tenían trabajo.
Entonces apareció un dragón que se le había dado el apodo de “La Draconesa”.
Con su función original llegando a su fin, ella reconstruyó Lindworm.
Ella convenció a muchos monstros de migrar a la ciudad, nutriendo la población de la ciudad mientras protegían el sustento de sus comerciantes y encargados.
En orden de acomodar la variedad de formas de vida que cada criatura tenía, ella creó un nuevo plan de desarrollo de la ciudad.
La actualización de ese plan volvió brillantemente la ciudad en un lugar donde los monstruos podían vivir fácilmente.
La arena era un ejemplo perfecto.
Ella reclutó peleadores y estableció regulaciones detalladas para sus luchas.
Además, se aseguró de que las apuestas funcionaran bajo estrictas normas bien definidas. La arena una vez usada para ejecuciones, se había transformado en un lugar donde esos militares formados podían usar sus habilidades en combate para entretener a la audiencia.
Estos días, todos saben lo difícil que es conseguir asientos para las peleas entre guerreros de alto perfil.
Tenía una reputación de ser un lugar donde podían verse poderosas fuerzas y habilidades enfrentarse.
«Fue gracias a la Draconesa que Lindworm haya crecido en estos 10 años. Escuché que muchos de los mercenarios empezaron una nueva vida como guerreros en la arena. Incluso con la guerra terminada y sin sustento como soldados, en Lindworm ellos podían seguir como luchadores. No usan armas de verdad, así que hay poco riesgo de muerte»
«Si, lo sé»
Glenn dijo.
«Que tratas de decir?»
«Me refiero al rápido crecimiento, todavía existen cosas que hay que atender… La carga de trabajo del Dr. Glenn va a crecer con ello»
Sapphe mezcló un suspiro con sus palabras y Glenn reía secamente.
Solo porque la guerra haya acabado y un gran número de monstruos se habían reunidos en Lindworm no significaba que el número de doctores de monstruos aumentara.
En todo Lindworm, existían solo dos lugares donde los monstruos podían ir para una consulta médica.
El primero era el Hospital Central de Lindworm, que era dirigido por la profesora de Glenn, Cthulhy.
El segundo era la Clínica Litbeit que operaba Glenn.
El hospital central tenía más facilidades a su disposición y podía manejar cirugías complicadas, pero manejar tal hospital de gran escala significaba que el personal, incluido la directora Cthulhy, estarían ocupados.
El tiempo de espera de los pacientes era grande.
Por lo tanto, los pacientes que experimentaran problemas que no necesitasen un viaje al gran hospital iban hacia la clínica de Glenn.
Esto no quería decir que su clínica no estuviese ocupada, solo que se las arreglaban para sacar tiempo suficiente de complacer a ogros ancianos que usaban un dolor de pierna como excusa para ir y hablar un poco, de vez en cuando, tenían trabajo dado por su maestra.
Cthulhy era incapaz de atender la rutina medica de los peleadores que aparecían en los encuentros de la arena, así que su trabajo de ese día era un ejemplo de uno de esos encargos que Glenn tenía que completar.
«Honestamente, hacernos cerrar la clínica por todo el día y enviarnos en un viaje a la arena… esa octo-mujer no considera nuestra situación en absoluto…»
«ya lo sé, pero no necesitas decirlo de esa forma, Sapphe. La Dra. Cthulhy está ocupada también»
Los luchadores en la arena constantemente eran heridos en sus enfrentamientos. Muy rara vez, perdían su vida debido a accidentes que ocurrían durante las peleas.
En orden de prevenir situaciones como esa, era necesario un doctor que pudiera examinar y diagnosticar monstruos.
«Lo sé, pero aun así»
Sapphe lucia como si no aceptara las palabras de Glenn. Aunque ambos eran distinguidos discípulos de Cthulhy, no se llevaban realmente bien.
Por parte de Glenn, pensaba de forma optimista que eran amigos lo suficientemente cercanos que se sentían cómodos al discutir entre sí.
«Como sea»
Sapphe continuó.
«No hay nada que podamos hacer más que aceptar sus demandas. La examinación de hoy se enfocará en el rango 3 y 4 de los participantes. De acuerdo a los documentos que nos dieron, parece que muchos de ellos son centauros»
«Centauros, huh…»
Glenn miró al conductor del carruaje, cuyo rostro estaba repleto en sudor mientras halaba el carro hacia adelante.
Nacieron para ser hombres de caballería. Mientras se dice que grandes caballeros eran uno de mente con su caballo, eso solo se refería a los humanos.
De nacimiento, los centauros son capaces de correr tan rápido como los caballos, solo con un poco de entrenamiento militar, eran capaces de dirigir a otros hacia la batalla de forma esplendida.
Durante la guerra, los centauros cargaban a través de abiertas planicies con lanzas en sus manos, eran la más peligrosa amenaza para las fuerzas humanas.
Aunque Transportes Scythia ha mostrado su asentamiento en la industria del transporte actualmente, sus raíces se remontan a su vida como guerreros.
Como especies nacidas para la batalla, tiene sentido que un gran número de ellos hayan acogido una nueva vida como luchadores en la arena.
«Estaremos tomando sus medidas de peso y altura, además de dar consultas médicas a los pacientes»
Sapphe dijo
«Estará bien eso?»
Glenn asintió
«Si, está bien. No hay nadie que necesite tratamiento inmediato, cierto?»
«Parece que cualquiera en esa condición es enviado al Hospital Central»
Dijo Sapphe, con una mirada de calma, una asistente de mente fría.
«Nuestro trabajo es entrevistar a los participantes y descubrir cualquier lesión o signos de enfermedad que se hayan exteriorizado»
Descubrir dolencias de antemano y tratarlas apropiadamente durante las etapas tempranas también era parte del trabajo de un doctor, aunque naturalmente requería de mucho conocimiento y habilidad para hacerlo.
¿Qué pasaría si, por casualidad, un síntoma critico fuese pasado por alto?
Tendría un mayor impacto en la vida del paciente.
«Llegaremos pronto, Doc»
Dijo el centauro
«Puedo dejarlos en la entrada principal?»
«No, por favor llévanos a la parte de atrás»
«La entrada de “Solo acceso autorizado” huh? Está bien»
La entrada principal tenía una multitud de audiencia circulando; entrar en la sala de espera de los participantes desde ahí sería un poco difícil.
Glenn reunió algunos documentos y herramientas necesarias para los exámenes médicos y se preparó para bajar del carruaje.
A pesar de que viajaron una gran distancia desde la clínica, sumado al conductor centauro cubierto en sudor, Glenn dejó entrever una deslumbrante sonrisa y no podía hacer otra cosa que llenarse de admiración por él y su habilidad para correr tan lejos.
Finalmente, rodearon el camino hasta la parte de atrás de la arena y llegaron a una parada. Glenn bajó del carruaje primero e inmediatamente se giró para ayudar a Sapphe.
Sapphe, sin embargo, usó su cuerpo de serpiente para bajar suavemente por la rampa del carruaje y no necesitó realmente la ayuda de Glenn en absoluto.
Aun así, Sapphe se veía algo feliz al sostener la mano de Glenn.
«Así que va a estar haciendo los chequeos de los luchadores el día de hoy?»
Preguntó el conductor, descargando el gran equipaje de la parte de atrás del carruaje.
Dado que algunos equipos guardados eran frágiles, Glenn no estaba especialmente entusiasmado en dejar su cuidado a algún extraño, pero el centauro fue sorpresivamente cuidadoso y ordenado en como cargaba las bolsas.
«Si, así es»
«En ese caso, parece que terminará conociendo a nuestra princesa. Estaremos contando con usted para cuidar de ella»
Dijo el robusto centauro mientras bajaba los utensilios médicos.
¿Princesa?
Glenn no había escuchado nada acerca de la existencia de una familia real de los centauros, pero antes de que pudiera preguntarle al conductor, este ya había empezado a halar el carruaje, dirigiéndose rápidamente hacia el camino principal.
«De que estaba hablando…?»
Antes de que pudiera salir con más preguntas, su mano fue atrapada por la larga cola de Sapphe.
Con su apuro, prácticamente arrastrándolo, Glenn se movió hacia la arena.
* * *
La localización para los chequeos médicos era en los terrenos de practica en la parte de atrás de la arena, donde los participantes entrenaban.
El terreno tenía una superficie suave y libre de maleza, había un numero de muñecos de practica para los luchadores dispersos por el lugar. También había alrededor de 50 guerreros reunidos ahí.
Todos ellos de rango medio. Ninguno tenía lesiones tontas típicas de principiantes, eran capaces de participar en intensas batallas durante todo el día y toda la noche.
Muchos de ellos estaban vestidos en una especie de simple y escasa armadura que no era comúnmente usada en una batalla real, pero hecha específicamente para combates en la arena. Otros sostenían las armas de madera que usaron en sus encuentros.
Había un diverso rango de especies de monstruos entre ellos.
Sin embargo, justo como indicaban los documentos que habían recibido de antemano, parecía que muchos de ellos eran centauros, un monstruo caracterizado por su cuerpo superior como el de un humano y su cuerpo inferior como el de un caballo.
Dada su forma, era natural para ellos ser más altos que los humanos, lo suficientemente alto para que Glenn tuviera que levantar su cabeza para poder mirarlos.
En cuanto a longitud, las lamias eran más largas, pero ya que enroscaban su cuerpo y doblaban sus largas colas, los centauros parecían más grandes.
Sapphe, con sus hombros delgados, lucia más pequeña en comparación.
Los poderosos guerreros centauros fueron envueltos en un tipo de tensa atmosfera.
Entre ellos había una figura que sobresalía del resto.
«Bienvenido!»
Con una voz muy bien proyectada, una mujer dio un paso al frente.
Su gran cabello rubio reunido en un moño, daba una fresca y vigorizante impresión.
Ella parecía alta, incluso para un centauro, Glenn no podía encontrar su mirada sin levantar su cabeza.
Sus ojos turquesa lo miraban directamente.
La armadura que vestía era ligera, pero con su patrón a cuadros y superior artesanía, era diferente del resto.
La cresta en su pecho también indicaba que tenía un estatus social que le permitía gastar dinero en adornar su armadura.
El diseño único sobresalía claramente en la arena.
Su cuerpo inferior era como cualquier otro centauro, Glenn podía darse cuenta de ello, pero por la manera en la que su pelaje negro yacía, significaba que había sido meticulosamente cepillado.
Era claramente una luchadora basada en la armadura que portaba, pero ya sea por su cabello rubio con estilo o su pelaje diligentemente mantenido, era claro que se le había dado atención estricta a su aseo y apariencia.
Era como si ella fuese una actriz principal de un teatro.
«Bienvenido a la gran Arena de Lindworm! Mi nombre es Tisalia Scythia, soy una guerrera de tercer rango aquí! Me gustaría agradecerle por tomar tiempo de su atareada agenda y realizar nuestro chequeo médico en lugar de la Dra. Cthulhy… Oh, eres sorpresivamente joven para ser un doctor, cierto?»
El saludo de la centauro rubia había terminado con un tono de sorpresa.
Ya sea por sus exagerados modales o su inesperada voz, la impresión que daba era menos que la de una guerrera y más como la de una actriz.
«G-Gusto en conocerla. Mi nombre es Glenn Litbeit, y estaré examinándolos a todos el día de hoy, ella es mi asistente»
«Saphentite Neikes»
Retorciendo su cuerpo, Sapphe bajó su cabeza.
«Escuché que ustedes eran discípulos de la Dra. Cthulhy, pero pensar que serían tan jóvenes… Incidentalmente, ¿qué edad tiene, Doctor?»
«Diecisiete»
Sorprendidas e intrigadas voces salían de la multitud. Al principio, Glenn pensó que sospechaban de un doctor tan joven, pero parecía que este no era el caso con los luchadores.
En su lugar todos lo miraban sin reservas con curiosidad.
«Todos ustedes están siendo un poco groseros!»
Dijo Tisalia, y el animado grupo de guerreros obedientemente respondió.
«Discúlpenos»
La centauro continúo hablando.
«Honestamente… me disculpo, Doctor. Ellos solo piensan que es raro para un humano ser doctor de monstruos»
«Señorita Tisalia, ha tenido una larga carrera como luchadora?»
Preguntó Sapphe.
Juzgando solo por el comportamiento de Tisalia, parecía que ella ha tomado un rol de liderazgo entre los peleadores, pero Tisalia sacudió su cabeza en negación.
«No, después de todo, todavía soy de tercer rango. Estoy en la mitad de los rangos de la arena»
«Si, pero… aun así, todos parecen tener una gran cantidad de respeto hacia usted»
«Bueno, eso es obvio dado quien soy yo!»
Tisalia infló su pecho.
Glenn había escuchado que los centauros a menudo tenían un gran busto, pero parecía que Tisalia era aún más grande que el promedio.
Más que eso, con lo alta que era, los grandes atributos de Tisalia estaban justo frente a sus ojos.
Sin importar si lo disfrutaba o no, sus ojos fueron atraídos hacia sus senos.
«Oh, dios»
Dijo él.
Notando la mirada de Glenn, Tisalia sonrió
“Oh, bueno, bueno! Supongo que es imposible no ser encantando por mi cuerpo celestial!»
«N-no, no es eso… no era mi intención en absoluto!»
Glenn desesperadamente negaba lo que Tisalia había dicho, pero no se podía ocultar que su mirada se había fijado en su pecho.
Junto a él, los ojos de serpiente de Sapphe lo miraban intensamente.
«De cualquier forma, eso no era a lo que me refería»
Dijo Tisalia.
«Esto es lo que quería que viera»
Ella mostró el emblema pintado en su armadura.
En ese lugar había una cresta que Glenn había visto antes, dos espadas cruzadas entre sí. Era el mismo símbolo que tenía el carruaje del centauro que trajo a Glenn y a Sapphe a la arena unos momentos antes.
«Oh, ya veo… en ese caso, usted es…»
«Así es! ¡Heredera de la única compañía de transporte en la ciudad! Soy la hija única que representa a Transportes Scythia, la compañía que puede llevar a quien sea donde sea, con nuestro lema “Desde paquetes hasta personas!» Estaré esperando el respeto que se adapte a mi estatus! ¡Ha ha ha ha!»
Ella dio una fuerte y bulliciosa carcajada, manteniendo su mano a la altura de su boca. Ese gesto iba bien con ella.
Glenn ahora entendió. Cuando el conductor mencionó a la «Princesa», debió haber estado hablando de ella.
Los Scythia eran una prestigiosa familia de centauros. Durante la guerra, se decía que eran veteranos guerreros activos en el campo de batalla.
Estos días, operan el negocio del transporte en Lindworm, el cual incluye una gran variedad de servicios.
Desde un simple envió hasta una caravana capaz de transportar grandes cantidades de bienes y personas. Y ella era la hija única de esta gigante compañía.
Glenn ahora se daba cuenta del porque la llamaban «Princesa».
Incluso si los Scythia no eran una familia real, para los centauros de Lindworm, Tisalia era indudablemente merecedora de ese título.
En efecto, sacando su voluptuoso pecho y riendo tan fuertemente, ella daba la sensación de alguien que forzada a otros a obedecerla.
Que ella se haya vuelto una especie de manager en la arena fue debido a esa personalidad.
«Bueno, ahora… nuestras presentaciones se han desviado un poco, pero le pediré que empiece la examinación pronto. Kay! Lorna!»
“Si, mi señora!»
«Aquí estamos, mi señora»
Al llamado de Tisalia, dos mujeres centauro atendieron a ambos lados.
Mientras que su equipo no era de tan alta calidad como el de Tisalia, ambas compartían la misma armadura y emblema en su pecho.
Presumiblemente, ellas eran asistentes o guardaespaldas que servían a Tisalia. Su presencia en la arena significaba que ellas eran luchadoras también.
«Por favor, formen una línea como siempre. Ahora, Doctor, usted estará aquí»
«O-ok»
La atmosfera desordenada que había estado ahí desde que Glenn y Sapphe llegaron se evaporó.
Bajo la dirección de Kay y Lorna, la masa desorganizada de guerreros se juntó en una línea como si fueran entrenados como soldados.
«Ha habido bastantes chequeos médicos aquí, así que nos hemos acostumbrado a ello»
Tisalia le dijo eso a Glenn como si no fuera nada, todo mientras observaba a los otros 50 peleadores y gritaba órdenes precisas.
«No tengo dudas acerca de sus habilidades, Doctor»
Ella continuó
«Después de todo, La señorita Cthulhy fue la que lo sugirió para el trabajo. Estaré contando con usted para asegurarse de que todos estén en plena forma para sus encuentros»
«…No creo que pueda compararme con la Dra. Cthulhy, pero haré mi mayor esfuerzo»
Dijo él.
Tisalia dio otra bulliciosa carcajada antes de entrar a la línea, sus pezuñas sonaban mientras se movía.
Sus brazos y piernas estaban bien balanceadas y parecían las extremidades de un verdadero guerrero.
Tenía una buena postura, quizás dado a su bien entrenada parte superior.
Cubierta en un pelaje de color negro, su parte baja tenía cuatro piernas, las cuales cualquiera que supiera un poco sobre caballos las encontraría encantadoras.
«Quien pensaría que alguien así sería un guerrero aquí, ¿huh?»
Dijo el
«Estoy de acuerdo, no esperaba nada más que violentos rufianes»
No hubo ninguna restricción en la elección de palabras de Sapphe.
Glenn pensaba al respecto, sin embargo, el modo en el que estaba la arena ahora, quizás, era la manera natural de las cosas.
Fue, después de todo, un lugar donde ya no se asesinaban personas entre sí, al contrario, un lugar donde guerreros competían usando sus habilidades en combate, actuando para los aplausos de la audiencia.
La belleza de su apariencia y la elegancia de sus técnicas en el ring eran cosas que las luchadoras femeninas tenían que tener en cuenta.
«Bueno entonces… vamos a trabajar, Dr. Glenn. Y por favor trabaje apropiadamente, sin dejarse hechizar por los pechos de alguien»
«N-no estaba hechizado o algo así, de verdad»
Glenn protestó libremente
Cualquier otra objeción de su parte fue silenciada fácilmente por esa mirada de serpiente.
* * *
El chequeo médico se completó sin inconvenientes.
Todo fue gracias a las 3 centauros: Tisalia en su rol de pacificadora y sus dos asistentes, Kay y Lorna.
Formando una línea, todos los guerreros aceptaron la examinación con indiferencia, por esa razón, el trabajo de Glenn también procedió cómodamente.
Habían muchos centauros entre los luchadores, así que Glenn asumió que de alguna u otra forma, muchos de ellos estaban conectados a la compañía de Transportes Scythia, esa fue una de las razones por la cual Tisalia fue capaz de liderar al grupo en la forma en que lo hizo.
Pero, por otra parte, durante las examinaciones…
«Doctor, sé que es un poco joven, pero me pregunto si usted estaría satisfecho con una centauro como yo»
Las palabras de Tisalia generaron una pequeña escena.
«P-por «satisfecho» a que se refiere?»
El preguntó.
«Bueno, soy la heredera de la Compañía de Transportes Scythia. Eventualmente, tendré que dirigir a los centauros de Lindworm y asumir la carga del futuro de la compañía. Siendo ese el caso, en primer lugar, tendría que casarme y tener hijos. Mis padres son entusiastas al respecto de mis entrevistas con potenciales parejas, pero ninguno de los hombres que me han presentado han sido un buen partido.»
Glenn le hizo quitarse la armadura y estaba sosteniendo un estetoscopio hacia su pecho. Aunque estaba sobre su delgada ropa interior, todavía estaba tocando su voluptuoso cuerpo, pero talvez porque era por una examinación médica, a Tisalia no parecía importarle.
Mientras tanto, su pequeña charla continuó sin final.
«Yo quiero a una excelente persona talentosa. Mientras que los Scythia somos famosos como un clan guerrero, no tengo interés en un fuerte y vigoroso compañero. Yo, bueno… soy algo inepta cuando se trata de educación y cultura. Me pregunto si no hay alguien que pueda cubrir esas deficiencias de mi parte»
Por como sonaba, parecía que estudiar era su punto débil. Glenn desesperadamente se deshizo del pensamiento que estaba flotando en su mente.
Mientras que su parte baja era la de un caballo, pensar que su cerebro fuese similar al de un equino era extremadamente una ofensa.
«Así es. Alguien como, digamos… alguien que es tan brillante que ha estado diagnosticando y tratando monstros desde una edad temprana, quizás»
Tisalia miró a Glenn de reojo.
Pareciera que no hacía falta más de un día de conocerse, para que fuera incluido entre sus prospectos de matrimonio.
En todo caso, Glenn tenía más curiosidad acerca de los hombres que no pudieron cumplir sus expectativas.
«Discúlpeme?»
«Aaah!»
Hubo un repentino grito.
La razón era obvia: una cola había envuelto su parte inferior.
Incluso los ojos de Glenn se asombraron ante la presente situación.
La culpable no necesitaba ser nombrada. Solo había una persona presente que poseía escamas blancas de serpiente.
«Señorita Tisalia. Las medidas alrededor de su cadera han incrementado un poco comparado con las del último mes. Perdóneme al decir esto, pero le recomiendo que baje un poco de peso»
«Estábamos teniendo una muy importante conversación! Y más importante, podría no medirme con su cola de serpiente?! Esto es lo que necesita medir! Aquí es donde está la cadera de un centauro!»
Aunque estaba enojada, Tisalia tenía razón en sus palabras y le mostró la cadera de su parte superior.
Por supuesto, desde que los centauros tienen dos áreas de estómago en sus cuerpos, Sapphe no estaba técnicamente mal con sus medidas.
«Me está diciendo que como enfermera no tiene tal conocimiento?!»
«No soy una enfermera, soy una doctora»
«Eso no hace diferencia!»
A medida que gritaba, Tisalia se subió rápidamente sus ropas, exponiendo el limite exacto entre su parte inferior de caballo y su parte humana superior.
Glenn no sabía dónde debían estar sus ojos con ella exponiendo su propio estomago sin reservaciones.
«Ahora eche un vistazo, mujer serpiente! Mire esta esta magnífica figura! La reto a decir que ha crecido una pulgada!»

Era cierto que, posiblemente gracias a su habitual entrenamiento y disciplina, el abdomen de Tisalia era bastante firme y fuerte. Combinado con sus sorprendentes pechos, Glenn pensó que las curvas de su cuerpo eran lo más fascinante.
«El Dr. Glenn todavía es un doctor novato»
Dijo Sapphe
«Son 30 años muy temprano para estar hablando de alguna entrevista de matrimonio»
«Seré un hombre viejo para entonces»
Protestó Glenn.
«Es mejor mientras más pronto se case alguien con una centauro»
Dijo Tisalia.
«No estoy seguro de eso tampoco»
Dijo él.
Aparte de este intercambio durante la examinación de Tisalia, el chequeo había terminado sin problemas.
Glenn y Sapphe terminaron de limpiar sus utensilios y llenaron los documentos necesarios antes de que se ocultara el sol.
Sin tropezar con alguna situación que sugiriera una crítica enfermedad, era seguro para ellos decir que en general todos los luchadores estaban en buena salud.
Por otra parte, había un puñado de ellos cuyas lesiones ya estaban siendo tratadas, otra característica distintiva de los participantes en la arena.
Había unos poco quienes Glenn quería prohibir de participar en cualquier enfrentamiento por un tiempo. Pero cuando consideró que estas batallas eran su sustento de vida, no tuvo el coraje de decirles que no pelearan a causa de algunas lesiones menores.
Por ejemplo, había un centauro que se había torcido su pierna derecha frontal, pero aun así iba a pelear en un encuentro al siguiente día.
Al final, Glenn decidió tratarlo con una simple rodillera. La lesión del centauro no era nada grave, pero había muchas razones para preocuparse, con la arena siendo el lugar que es, podía conducir a otra lesión mucho más grave en futuros enfrentamientos.
La Dra. Cthulhy había estado a cargo de las examinaciones medicas hasta el mes pasado. Juzgando por el registro que llevaba, no interfería mucho en la vida de los participantes.
Les daba a las lesiones la cantidad mínima de tratamiento requerido, había unos pocos ejemplos donde le decía al paciente que cancelara sus peleas.
Todos ellos fueron instancias donde el paciente estaba claramente sufriendo una grave lesión o enfermedad.
«Supongo que debería seguir su ejemplo…»
Encima de estar en nombre de la Dra. Cthulhy, Glenn también pensó que este era el curso lógico de acción.
«Dr. Glenn, he terminado con la limpieza»
Dijo Sapphe, después de que Glenn le pidiera que juntara algunos documentos.
A pesar de sus preocupaciones, Glenn también había terminado de reunir sus cosas para regresar a la clínica.
«Ok, gracias… me gustaría agradecerle apropiadamente a la señorita Tisalia y despedirme…»
Sin embargo, la princesa de la familia Scythia dijo que tenía unos asuntos que atender y se dirigió a la arena, como era de esperar, Glenn no tuvo el coraje de seguirla hasta la colosal estructura.
Los luchadores que seguían en los terrenos de practica eran escasos.
Con todos reunidos para la examinación, parecía que tenían sus propios combates que arreglar y así entrenar para ello, aquellos quienes terminaron el chequeo habían dejado el lugar.
«Bueno, si ella no está aquí, entonces no hay nada que pueda hacer al respecto. Hemos terminado todo nuestro trabajo, así que solo puede preguntarle a alguien y terminar con ello»
Las palabras de Sapphe fueron afiladas.
Glenn estaba seguro de que la disputa anterior con Tisalia, incluyendo el asunto del matrimonio, tenía un persistente efecto en su humor.
Sin embargo, Glenn estaba de acuerdo con lo que dijo, Todo lo que necesitaba hacer era pedirle a alguien que le pasara el mensaje a Tisalia.
Solo necesitaba encontrar a alguien cercano a ella, como esas dos asistentes que tenía antes a su lado, pero…
«Discúlpeme»
Justo cuando pensaba en eso, ellas aparecieron.
«Doctor»
«Tiene un momento?»
Eran las dos centauros, Kay y Lorna.
«Oh, sí. Gracias por su ayuda hoy. Fuimos capaces de terminar la examinación sin problemas gracias a su asistencia»
«Gracias por su trabajo, Doctor»
«Nuestra señora también estaba muy complacida. Tiene nuestra gratitud»
Ellas bajaron sus cabezas en señal de respeto. Como era de esperarse de las doncellas de Tisalia Scythia. La única heredera de un imperio comercial, ellas parecían tener cierta dignidad diferente a las de otras asistentes comunes.
Su pelo uniformemente cortado y pelajes color castaño lucían muy similar. A Glenn le costaba identificar quien era Kay y quien era Lorna.
No parecían ser hermanas, pero se sentía que estaban intencionalmente copiando la esencia de la otra.
Siendo apropiado para la arena, estaban vestidas en una armadura ligera, pero sin ninguna duda un delantal de maid se vería muy bien en ambas.
«Entonces… Doctor»
«No queremos ser groseras, pero tenemos algo que discutir con usted»
«Discutir…?»
Dijo Glenn.
Kay y Lorna asintieron al mismo tiempo.
«Cuáles fueron los resultados del examen de la señorita?»
«No está sufriendo ningún tipo de enfermedad?»
«Enfermedad…?»
Repitió.
En la opinión de su diagnóstico, no había nada que sugiriese ninguna mala condición en Tisalia.
Tampoco parecía sufrir de alguna lesión, no había signos de alguna enfermedad latente.
Por supuesto, Glenn todavía era inexperto, así que no era completamente imposible que algo pudiese haber sido pasado por alto, pero…
«Tisalia Scythia tiene una salud extremadamente buena»
Fue Sapphe la que habló
«No hay cambios significativos en el peso de su cuerpo, justo como ella dijo. Creo que es porque lleva un estilo de vida saludable, entrenamiento habitual y ejercicios. Por lo menos, desde nuestra posición, no hay nada que indique mínimamente que ella tenga algún problema»
«Oh…»
«Ya veo…»
Kay y Lorna estaban visiblemente decepcionadas por las palabras de Sapphe.
Estando cabizbajas, seguían con una mirada de preocupación.
Lo que Sapphe dijo era cierto… No había nada que mostrara que Tisalia estaba enferma. Sin embargo, las expresiones de Kay y Lorna eran algo que Glenn había visto muchas veces en diferentes ocasiones.
Era la mirada ansiosa de incertidumbre que tenía un paciente o familiar cuando su ser querido sufría de una grave condición.
«Hay algo de lo que ustedes estén preocupadas?»
Glenn les dijo a las chicas, pensando que se quedarían en silencio.
«Por favor díganme cualquier cosa. Incluso si está en buena salud… si ella o aquellos cercanos a ella están preocupados de que algo de hecho pueda estar mal, entonces no podemos decir de que está verdaderamente sana»
El hizo una pausa, y entonces dijo.
«Señorita Kay, Señorita Lorna, La señorita Tisalia es una persona muy importante para ambas, ¿cierto?»
«S-si»
«Por supuesto»
«En ese caso, por favor díganme todo. Si después de eso, puedo garantizarles nuevamente como doctor que ella no está enferma, entonces estoy seguro de que eso les dará paz a sus preocupaciones»
Kay y Lorna se miraron una a la otra.
Al mismo tiempo, Glenn pensó en Tisalia y el hecho de que sus compañeras la apreciaban a tal grado. El solo la había conocido por poco tiempo, pero pensó que ella verdaderamente era alguien que estaba por encima de todos los que la rodeaban… una verdadera líder.
Después de que ambas asintieran con la cabeza, las acompañantes de Tisalia empezaron a hablar.
«Entonces, déjenos decirle…»
«De hecho, mi Señora tiene…»
* * *
La luna era visible.
La ciudad de Lindworm estaba situada al pie de las montañas Vivre, desde su altura fluía una constante brisa helada, así que incluso en días calurosos, la temperatura en la noche bajaría sorprendentemente.
Pero a pesar de las frías noches, la vista de la luna entre los picos de las montañas Vivre era famosa.
La belleza de la clara luz lunar en el aire fresco la hacía uno de los lugares más pintorescos de todo el continente.
Se decía que nada podía comprarse al amarillo brillante de la luna de Otoñó en la ciudad del dragón.
Las montañas eran siempre visibles desde Lindworm, el relucir de la luna era una vista que cualquiera podía disfrutar.
«Veo que sigues despierto»
Le dijo Sapphe a Glenn mientras veía la luna desde la clínica.
«Sapphe… puedes irte a la cama, ya es un poco tarde después de todo»
«Eso es lo que yo debería decirte. Pensé que tal vez estarías por aquí y decidí venir a ver… qué estás haciendo? Estar así es malo para tu salud»
Sapphe y Glenn tenían cada uno su propia habitación anexada a la clínica, pero estaban escasamente amuebladas, así que rara vez regresaban a su propio cuarto.
Ya sea porque había trabajo por terminar o simplemente porque tenían algo en mente, usualmente saldrían a mirar la luna desde la ventana de la clínica.
Parecía que Sapphe había adivinado lo que pensaba Glenn.
Solo ella podía hacer eso, supuso él, gracias a su larga amistad.
En efecto, ambos eran amigos de la infancia.
Antes de que Saphentite y Glenn se volvieran estudiante en la academia, ya eran conocidos entre sí. De hecho, cuando eran muy jóvenes, ambos vivían juntos bajo el mismo techo.
Luego, cuando ellos se reunieron en la academia, Glenn recordó que tan impresionado estaba por cuanto había cambiado Sapphe.
La débil niña que recordaba se había desarrollado en una inteligente y talentosa mujer.
«Incluso desde esta tarde, ha estado en mi mente.»
«La señorita Tisalia, cierto?»
«Si, Kay y Lorna realmente parecían preocupadas. Me he preguntado si hay algo que podamos hacer»
«Algo que podamos hacer?»
Nuestra señora no puede ganar ningún encuentro.
Escuchar esas palabras de las doncellas de Tisalia, le dio naturalmente una expresión complicada a la cara de Glenn. Después de todo, Tisalia no mostraba ningún desliz en su inquebrantable confianza.
Era difícil de creer que la mujer que había visto reír con un espíritu más alto que el resto de los guerreros pudiera estar en una mala racha.
Y, aun así, de acuerdo a lo que dijeron Kay y Lorna, su tasa de victorias ha ido decreciendo los últimos meses notablemente.
Tisalia no era el tipo de luchadora que se saltara su entrenamiento diario. Y haber nacido en una familia de guerreros significaba que su talento para las artes marciales era obvio para cualquiera que la viera combatir.
Para Kay y Lorna, parecía que ella estaba sufriendo algún tipo de condición… ¿por qué alguien continuaría perdiendo una y otra vez?
«Si me preguntas»
Dijo Sapphe
«Un bajo número de victorias es algo que pudiera pasarle a cualquiera. Ningún guerrero es invencible. Una mala racha no es tan rara, cierto? Mientras no sea a causa de alguna enfermedad»
«Si ese es el caso, entonces está bien»
Glenn estuvo de acuerdo.
Si era un bajón normal, entonces no había necesidad de preocuparse al respecto. Pero si por casualidad estaba pasando por alto algún detalle… esa posibilidad era extremadamente aterradora para él.
Si no se dio cuenta de algún tipo de enfermedad latente dentro de ella a pesar de los signos presentados… bueno, dependiendo del tipo de enfermedad, la vida de Tisalia podría estar en grave peligro.
Proteger la vida de otros era el deber de Glenn como doctor.
«Pero la posibilidad de que ese no sea el caso me asusta»
Dijo Glenn mientras observaba la luna.
El esperaba que Sapphe le dijera que estaba preocupándose de más, pero todo lo que ella hizo fue soltar un suspiro.
Ella quizás estaba harto de él, fue lo que pensó, y su exasperación fue inevitable, pero…
«Le gustaría tomar un trago, Doctor?»
«Huh…? Por trago, ¿te refieres a alcohol?»
«Si»
Dijo Sapphe
«Si no tiene ninguna preferencia, prepararé una bebida medicinal con licor y hierbas. Es débil, así que no le afectará mañana, creo que le ayudará a aclarar su mente»
Glenn no era muy bueno con el alcohol.
Sin embargo, pensó que eso podía ser un poco más efectivo en relajarlo que estar mirando vacíamente hacia la luna.
Tomó su decisión, Glenn le pidió un vaso a Sapphe.
«En ese caso, por favor espere un momento»
Dijo Sapphe y dejó la habitación.
Glenn se quedó pensando mientras esperaba. Confiando en la luz de la luna, tensó sus ojos a medida que veía los documentos frente a él.
El papel seguía siendo una comodidad valiosa, pero en la clínica era una necesidad.
Estos eran los archivos médicos entregados por la Dra. Cthulhy. Contenían todos los datos de las examinaciones realizadas el mes anterior.
En pocas palabras, su condición era normal. Ningún síntoma o malestar se había encontrado en Tisalia… y si ese era el diagnostico de Cthulhy, entonces Glenn podía pensar que seguramente no estaba erróneo.
Después de todo, era congruente con su diagnóstico también. Tisalia no estaba enferma.
Adicionalmente, no había registro de algún antecedente o lesión anterior. Sin alguna otra cosa especial en sus registros, era seguro decir que está en buena salud actualmente, como lo ha estado en el pasado.
Pero por otra parte…
La salud era algo que podía ser afectada incluso por una cosa aparentemente trivial.
Las dos que servían a Tisalia, Kay y Lorna, eran ciertamente las únicas en saber si ella estaba en una mala racha.
Era lógico para Glenn confiar en sus palabras.
Quizás es que hay un factor primario que incluso un doctor podría evitar notar, reflexionó.
Tal vez eso es lo que está causando que Tisalia está en esa pobre condición. Por otra parte, quizás el hecho de que nada esté escrito en los documentos simplemente significa que su molestia originalmente no merecía ser anotada en primer lugar.
«algo no registrado…hm?»
«Aquí tienes»
Glenn pensó que había alcanzado algún tipo de luz… cuando miró hacia arriba, había una mano estirada sosteniendo una copa roja transparente. Era una copa de alta calidad hecha en Lindworm. Estaba llena con hielo y un líquido.
«S-Sapphe… pusiste hielo?! Eso es para tratar la fiebre de los pacientes!»
«Solo usé un poco… está bien. Además, podemos obtener más de las montañas Vivre»
«Bueno, sí, seguro! Pero ese es un viaje de dos días hasta la cima!»
En la clínica, los cubos de hielo que obtenían de la cima de la montaña eran guardados en un cuarto en el sótano para que se mantengan. Por supuesto, ellos pedirían algunos al vendedor de hielo para sus tratamientos, pero era solo cuando fuese necesario, no para su vida cotidiana, ciertamente no para unas bebidas.
«El licor de hierbas y la frescura del hielo le ayudaran a trabajar en sus pensamientos. Solo un poco, Dr. Glenn. Por favor no sea tan estricto al respecto»
«Pero…»
«Beba»
Sonriendo… o más bien, viendo a Glenn desde el borde de sus ojos, Sapphe incluso se las arregló para verse un poco seductora. Aunque parecía que ella quería jugar un poco, la consideración que tenía hacia él era clara.
Él no podía rechazar su amabilidad, así que él tomó un sorbo del trago.
Un fresco, mentolado sabor fluyó por su garganta. Apenas se sentía el alcohol, y la refrescante dulzura hizo que Glenn sintiera su cerebro siendo revitalizado con una dosis de nutrientes.
«Esta bueno»
Dijo él.
«Gracias»
«Algunas buenas ideas vinieron a su mente?»
«Supongo. Si. Tisalia probablemente no esté enferma, pero aún puede haber algo ma-«
«Ngh, gulp, glug!»
El pensamiento de Glenn fue interrumpido por un sonido extraño.
«Huh, espera un momento!»
Se quejaba, a medida que Sapphe bebía su gran copa de alcohol. Él no había notado que ella también tenía una, era su cola la que la sostenía, además de sus manos.
Un fuerte ruido salía de su garganta mientras hábilmente subía la suave copa.
«Espera… que estas bebiendo? Jeez, apesta a alcohol! Este es Whiskey Firedragon. Por qué estas bebiendo algo tan fuerte?!»
«Fue un regalo de Key y Lorna. De agradecimiento por realizar el chequeo»
Glenn pensó que era extremadamente intemperante el dar alcohol a un doctor como agradecimiento por una examinación. Quizás era algún tipo de costumbre centaura.
El famoso Whiskey Firedragon de Lindworm… un licor destilado que se dice era lo suficientemente fuerte para hacer a alguien escupir fuego. Beber algo como eso era para asegurar estar ebrio en un instante.
Claramente verificado, con solo un trago, las mejillas de Sapphe se volvieron coloradas. Su sonrisa comenzó a cambiar, creciendo suavemente, como si se relajara.
«No se preocupe por mi»
Dijo ella.
«Descubrió la causa de la actual condición de la Señorita Tisalia?»
«No puedo decir nada obvio pero la Dra. Cthulhy no tiene nada escrito en sus archivos. Es por eso que pensé que no es ningún tipo de enfermedad»
«En ese caso…»
«Pero incluso si no es eso…»
Glenn continuó
«Hay momentos en los que un doctor debe actuar»
Inclinando su cabeza hacia un lado, Sapphe no parecía entender su línea de razonamiento.
Su cola de serpiente bajó la copa que sostenía y empezó a enrollarse alrededor de los brazos de Glenn.
Sapphe era una mujer que le gustaba beber y hacer que otros bebieran, así es como siempre ha sido cuando estaba embriagada.
Ella básicamente arrastraba a otros en su borrachera.
Enrollando su parte baja alrededor de otros era el mal hábito de Sapphe.
«Hay un lugar al que necesito ir mañana»
Dijo Glenn.
«Si es posible, quisiera ir a ver a Tisalia en la arena. Vendrías conmigo, Saphentite?»
«Honestamente…»
Dijo ella.
«Llevarme contigo mientras vas a ver a otra mujer? En qué estás pensando?»
«Estoy muy seguro que soy yo el que quiere hacer esa pregunta, pero…»
Él se calló mientras Sapphe se movía aún más a su alrededor.
El final de su cuerpo de serpiente estaba un poco enrollado alrededor de su brazo derecho. No era lo suficiente como para evitar que bebiera, pero la sensación de su estómago de serpiente en su piel era placenteramente genial.
Su cola continuaba envolviéndose alrededor de su cuello.
Aplicando fuerza gradualmente, empezó a apretar el torso de Glenn gentilmente.
Desde que estaba normalmente recogida, la verdadera longitud del cuerpo de Sapphe pasaba usualmente desapercibida… pero en realidad, era una cantidad considerablemente larga.
Envolver completamente el cuerpo de un ser humano era fácil.
Usando el alcohol como ayuda, ella no dudó en hacer las cosas que normalmente no haría.
«Me niego»
Dijo ella.
«Después de todo, solo vas a ser reclutado a una entrevista de matrimonio nuevamente»
«Aun así…»
Protestó él.
«Quizás estés satisfecho contigo mismo después de que esa princesa centauro te puso los ojos? Eres un hombre sin principios, cierto Doctor? Y para hacer las cosas peor, incluso fui advertida por Cthulhy de que no me perdonaría si alguna vez ponía una mano sobre ti!»
El agarre de su atadura creció rápidamente de una manera más intensa.
La fuerza que usaba para apretar el cuerpo de Glenn crecía con sus quejas.
Era sabido que los celos eran una característica de las lamia, pero Sapphe estaba siendo un poco más ruda de lo usual.
Glenn estaba seguro sin ninguna duda de que el fuerte, destilado licor que ella había ingerido tenía la culpa.
«No permitiré más rivales!»
Dijo ella.
«De qué estás hablando, Saphentite…?»
Respondió Glenn.
«Sabes que solo vamos a tratarla, cierto? No tiene nada que ver con ningún tipo de entrevista de matrimonio»
«Hmph! No puedo confiar en ti!»
Glenn se sacudía a medida que Sapphe reforzaba su agarre, casi derramando la bebida que ella se había molestado en prepararle.

Incluso el entendió que Sapphe envolviéndolo en su estado de embriaguez era su manera de actuar egoísta y mimada.
No importa que tanto tiempo hayan estado juntos, secretos… o cosas imposibles de decir… se acumularon hasta el punto de quiebre.
Incluso si su relación era normalmente caracterizada por ella regañando y sermoneando a Glenn, todavía habían cosas que ella no podía desahogar.
Quizás fuese por la naturaleza de su relación que ella no podía relajarse.
Sapphe lo tenía difícil también, después de todo. Como asistente, todos los asuntos misceláneos alrededor de la clínica eran dejados a ella. Glenn entendía la carga que le estaba poniendo. Y ahora, para encontrar una solución al bajón de Tisalia, él estaba tratado de tomar un trabajo en el que realmente no había necesidad de envolverse.
«Hey, Sapphe?»
«Si, Doctor?»
Sin embargo. Simplemente cambiando la manera de referirse a ella, Sapphe rompió hacia una fácil sonrisa. Glenn se preguntó si llamarla por su apodo realmente la alegraría tanto.
Él también se preguntaba si ella estaba actuando solo para hacer que Glenn la llamara por su apodo… o si todo fue gracias al alcohol.
«Me gustaría ayudarla»
Dijo él.
«Me asistirías mañana?»
«Por supuesto. Yo te seguiría a donde fueras»
Su expresión cambió sin esfuerzo, un reflejo de su personalidad calculadora. Ella liberó a Glenn de su atadura. Bebiendo como si eso no fuera muy bueno para su salud, Sapphe misma parecía entenderlo.
En realidad, ella no había tomado nada de alcohol recientemente, pero aparentemente quería liberarse el día de hoy.
Considerando todo, ella era una encantadora asistente. Dicho eso, la clínica había crecido con la ayuda de Cthulhy. Si ella supiera que sus estudiantes estaban susurrándose cosas dulces en la clínica, habría volado en una rabia tempestuosa.
En consecuencia, Glenn no podía aceptar exactamente que tener a Sapphe enrollada a su alrededor fuese de alguna manera, deseable.
La clínica era, después de todo, un lugar sagrado para el cuidado y tratamiento médico.
«Tómalo con calma, ok…?»
Dijo Glenn, preocupado si sus palabras de advertencia la habían alcanzado.
Después de su franco consejo, Sapphe dio una profunda sonrisa. Lo que sea que estaba pensando era inescrutable… incluso para alguien que ha estado por tanto tiempo a su lado como él.
Glenn no estaba seguro de cómo responder a su expresión, así que, a su vez, el terminó el resto de su trago. Sintió como la fragancia de hierbas había aclarado su cabeza un poco.
* * *
Tisalia no ganó al siguiente día.
La hija única de la famosa familia de centauros Scythia mordía sus labios, pero solo porque los terrenos de practica estaban vacíos.
Era la princesa de un orgulloso clan.
Incluso entre centauros, quienes se les considera generalmente una tribu de guerreros equinos, los Scythia eran particularmente excepcionales en cuanto a artes marciales.
Antes habían hecho vida cargando de campo de batalla en campo de batalla como mercenarios, sin recibir órdenes de nadie, obteniendo grandes sumas de dinero a cambio de sus servicios.
La guerra los llevo a numerosas tierras y dependiendo del periodo en cuestión, se habrían enfrentado entre familiares cercanos.
El abuelo y bisabuelo de Tisalia murieron en el campo de batalla.
Incluso su abuela era una fiera, aunque fuese una mujer, habría ido a la batalla vestida con casco y armadura.
No hacía falta decir que, en la larga historia del clan, muchos de sus miembros vieron el final luchando en la guerra.
Para los miembros del clan Scythia, sin embargo, esta no fue una tragedia.
Caer por una lluvia de flechas, morir a manos de una espada o una lanza en la guerra no era algo deshonroso. Para los Scythia, luchar apostando la vida, encontrar la muerte en medio de una batalla, era de hecho la manera ideal de conocer el fin.
Morir en cualquier otro lugar seria vergonzoso.
De esa forma, cuando la larga guerra entre monstruos y humanos llegó a su final hace 10 años, los Scythia se vieron forzados a tomar una decisión.
Cómo deberían vivir sus vidas ahora? Cuando la guerra acabara, qué harían todos aquellos que vivían en el campo de batalla?
Como el líder del clan, el padre de Tisalia habría conseguido la respuesta a este difícil asunto. Decidió comenzar un negocio en la nueva, todavía sin desarrollar, ciudad de Lindworm.
Usando su talento para el transporte, podrían mover bienes y servicios y así dar a conocer el nombre del clan.
Como semejante cambio significó dejar de un lado sus armas, hubo una gran oposición entre los miembros. Cuando decidió que se moverían hacia Lindworm, muchos de ellos abandonaron al padre de Tisalia.
Nos estas diciendo que seamos meros caballos de carga?
Dónde está tu gran orgullo como guerrero?
Tales fueron algunas de las críticas que su padre tuvo que enfrentar.
Pero al final de todo, tuvo éxito.
Ellos llevaban personas, empujaban carruajes y llevaban paquetes en su espalda. Con su confiabilidad y agilidad, Transportes Scythia se ganó la confianza de Lindworm.
Se volvió rápidamente una gran compañía sin la cual la ciudad no podría sobrevivir.
Al haber alcanzado tales logros y un nombre, nadie se atrevía a referirse a los Scythia como meros caballos de carga.
Su padre construyó un camino para el clan y siguió esa vía a través de los tiempos de paz, mostrando su brillante liderazgo.
Aunque ya no peleaban una guerra, era otra manera de describir sus logros como el trabajo de un general militar en acción.
«Pero…»
Murmuró Tisalia, aun mordiendo su labio en frustración.
Su padre era exitoso, lo cual estaba absolutamente bien.
En efecto, como la hija única del clan, un día tendría que liderar Transportes Scythia como su sucesora.
Pero si lo hacía, qué haría la familia Scythia, orgullosa de su fama como grandes militares?
Teniendo una forma de prosperar en la nueva era de paz, estaba realmente bien para ellos abandonar su pasado así de fácil? Ahora que existían buenos tiempos, ¿su historia y su honor del pasado ya no eran necesarios?
Absolutamente No.
Tisalia quería atesorar su gran gloria. Los Scythia fueron un clan de valor marcial, y ella quería que su nombre sonara a través de todo Lindworm. Adicionalmente, quería expandir el negocio familiar y asegurar su infinita prosperidad.
Asegurar estas cosas era su deber como la princesa de la familia. Esa es la razón por la que se volvió luchadora.
Sus padres estaban ocupados manejando el negocio.
Tener una lanza en sus manos era algo adecuado para alguien como ella, quien necesitaba más experiencia y mejorar su educación.
Como tal, ganar combates, alcanzar el más alto rango, ser introducida al salón de la fama y tener su nombre eternamente grabado en los monumentos de la arena, Tisalia Scythia estaba firmemente apuntado a todas esas cosas.
«Perdí hoy de nuevo»
Ella dijo eso y volvió a preparar la lanza que usó en la arena.
Sola, galopaba alrededor de los campos de entrenamiento. Había objetivos circulares con líneas concéntricas dibujadas mostrando donde debía apuntar.
Sonando sus cascos, ella apuntó a los objetivos y lanzó su lanza.
No podía ganar. Fue igual que el día anterior, y el anterior a ese.
Su record de peleas parecía estar disminuyendo día a día. No ha ganado un simple encuentro por un tiempo.
Incluso cuando todo su clan y todos sus fanáticos en la arena estaban apoyándola, esa horrible presentación fue todo lo que podía darles. Incluso ella no sabía que estaba mal. De lo que si estaba segura era que nadie quería verla deprimida, como lo estaba ahora.
Mordiendo sus labios en frustración y estar al borde de las lágrimas era algo que no era propio de la princesa del clan Scythia. Una princesa era alguien noble y orgullosa, alguien que tiene que cargar con el pasado y futuro de su familia.
Las princesas absolutamente nunca lloraban, nunca retrocedían, nunca se daban por vencidas.
Así es como Tisalia quería ser, por lo cual era la razón de estar blandiendo su lanza sola en los terrenos de práctica. No quería que nadie viera sus lágrimas. Dada su gran audacia, no quería mostrar ninguna debilidad.
Tal era la determinación de Tisalia, una princesa y guerrera.
Tsk
La lanza atravesó los objetivos con precisión. El elemento de madera se rompió limpiamente en dos y terminó en el suelo.
Pero… estaba mal. Algo andaba mal.
Ella no podía expresar que era, pero algo estaba mal en el instante en que arrojó su lanza. El momento en el que puso su fuerza en ello, extendió sus cuatro piernas y apuntó su filosa arma, un sentimiento de disconformidad subió a través de su cuerpo, solo para irse justo cuando estaba cerca de averiguar qué es lo que era.
Así es como ella perderá de nuevo. Una guerrera del calibre de Tisalia podía predecir cómo sería el encuentro incluso antes de empezar.
En su condición actual, sabía que no haría ninguna diferencia… ni siquiera incluso si ella fuese perfecta.
«Por qué…?»
La mano que sostenía su arma temblaba.
Kay, Lorna, sus padres y los grandes trabajadores de Transportes Scythia todos tenían confianza.
Ella no podía dejar estancarse aquí, no si ella quería pagarles de vuelta y mostrarles que el poder militar del clan Scythia seguía vivo, haciendo sonar su nombre a través del continente. Y aun así…
«Tengo que entrenar más. Mucho, mucho más»
El objetivo estaba otra vez en posición. La gran arma de Tisalia era una lanza arrojada a gran velocidad. Ella repitió el ejercicio una y otra vez, cuidadosamente examinando donde podía fallar.
Determinada, sus cascos resonaban a medida que ella pisoteaba fuertemente contra el suelo.
«Hm?»
Alguien estaba cerca en el lugar… ella no podía ver su sombra.
Extraño, pensó Tisalia.
No debería haber nadie en los terreros de práctica, no en este momento. Tisalia había elegido este tiempo para ir y entrenar en secreto.
Por qué, entonces, había alguien de pie, ¿a menos que hayan estado esperando por ella?
¿Quién era?
«…Doctor?»
Ahí, con una gentil sonrisa en su rostro, estaba Glenn Litbeit.
* * *
Glenn se sintió culpable por interferir en el entrenamiento secreto y especial de Tisalia.
Tisalia miró a sus dos acompañantes con una cara de sorpresa.
«Kay! Lorna! Cómo se atreven!»
«Discúlpenos…»
«…Mi Señora»
Ambas bajaron un poco la cabeza hacia Tisalia. Ella ha mantenido su entrenamiento en secreto, pero naturalmente sus doncellas estaban al tanto de la situación.
Ellas no podían interferir con todos sus esfuerzos y se han mantenido en silencio al respecto hasta que informaron a Glenn.
«Por favor no las regañe»
Dijo el
«… Dr. Glenn»
Kay y Lorna habían arreglado la inesperada petición de Glenn para ver a Tisalia.
Obviamente, las dos entendían los sentimientos de Tisalia con respecto a su entrenamiento y sus derrotas. Sin embargo, ellas debieron sentir que el tratamiento de Glenn era más importante, ya que ninguna de ellas mostró dudas mientras lo guiaban de vuelta a los terrenos de práctica.
«Bueno, Ahora… supongo que me han descubierto, cierto?»
«Estamos siempre con usted»
«Estamos al tanto de cómo se siente, mi señora»
«Estoy realmente bendecida por tener tan excelentes compañeras… Ahora Doctor, que lo trae por aquí el día de hoy? Surgió algo de la examinación de ayer?»
No había ningún signo de desesperación en los ojos de Tisalia, pero Glenn rápidamente reconoció que ella se estaba forzando a sí misma para mirar en su dirección.
Ocultando sus emociones, ella solo mostraba a los demás lo que ella quería que vieran. Tisalia era arrogante y dominante, sí, pero también era alguien que podía controlarse a sí misma.
«No, usted está sana. Seguro es gracias a su normal estilo de vida»
«Bueno, entonce-«
El continuó
«Pero la razón por la cual no estas ganando encuentros es clara. He venido a informarte de ello… y de ser necesario, lidiar con el problema»
«Le dijeron todo, cierto? Kay? Lorna?»
Dijo Tisalia y luego suspiró. Las dos chicas se disculparon al unísono, aunque no parecía que ella quisiera seguir tocando ese tema.
«Entonces, Doctor»
Dijo ella.
«Cuál es la causa de mi mala condición?»
«Cierto, la causa son tus pezuñas»
«P-pezuñas…?»
Glenn agarró una espada que estaba descansando a sus pies. No era una espada normal, más bien, una colosal y tosca hoja… que de ninguna manera era propia de un caballero como él.
La punta estaba doblada en un ángulo agudo, haciéndola lucir más como una hoz que como una espada, aunque era muy exagerada para ser utilizada en agricultura.
«Ah!»
Tisalia exclamó. A la vista de la brusca hoja, incluso ella no podía evitar estremecerse… pero eso no era todo. Había otra razón detrás de su reacción.
«Como sabe, la parte baja de un centauro es como la de un equino»
Dijo Glenn.
«Como especie, los centauros no tienen lazos con los caballos, pero es sabido que la manera de correr sobre grandes planicies es bastante parecida, han evolucionado de forma similar. Todo esto me fue enseñado por mi maestra»
«Y-y que se supone que significa eso?»
Dijo Tisalia.
«Es simple. Los caballos tienen pezuñas, las cuales, muy parecidas a las uñas humanas, crecen. Para aquellos que viven en espacios abiertos y grandes pastizales, la parte de las pezuñas que crece, se desgasta naturalmente. Pero viviendo en la ciudad, donde correr libremente no es usualmente una opción, puede causar que crezcan demasiado. Por otra parte, las carreras de caballos a veces hacen que se desgaste demasiado»
Glenn continuó su detallada explicación, pero sinceramente, su información debería haber sido obvia para un centauro. Debería ser aparente que dejar crecer y cortar las pezuñas deberían tener un en efecto en su movilidad.
Glenn les dio una vista rápida a las pezuñas de Tisalia. Claramente habían crecido demasiado. Había mucho acumulado en la punta. Su vida citadina, a pesar de su tiempo como guerrera en la arena, no le proporcionó la cantidad de ejercicio necesario. Caminar en las limpias y niveladas calles de la ciudad no era suficiente para mantener sus pezuñas naturalmente afiladas a una longitud saludable.
«Poner una herradura previene esta situación»
Glenn dijo eso mientras sacaba una. La idea básica era que la herradura fuese hecha para igualar la forma de la pata, la cual era fijada con clavos. Esto protegía a la pezuña y mantenía un paso estable en la criatura.
En pocas palabras, era una herramienta esencial para caballos domésticos.
Por supuesto, era un elemento necesario no solo para centauros, si no para cualquier animal con características similares.
En el peor caso, la falta de herraduras podía complicar las tareas más simples de la vida cotidiana. Vivir en la ciudad sin usarlas debió haber sido una gran dificultar para ella hasta ahora.
«Señorita Tisalia, está en buena salud»
Dijo Glenn.
«No hay graves lesiones ni enfermedades en sus antecedentes, no hay ningún simple registro de ningún tratamiento entre sus documentos»
«Cierto? Es verdad! Siempre he prestado mucha atención a mi salud!»
«No hay ningún registro de haber sido colocado un calzado, tampoco»
«Tch…»
Ella alejaba su mirada.
No había estado enferma, así que no había ninguna mención de eso en su historial acerca de no llevar un calzado.
Un típico centauro tiene sus herraduras puestas por alguien familiar experto en el proceso. Glenn se preguntaba porque no habían notado la ausencia de eso en el registro.
Si hubiera comparado sus archivos con los de otros centauros, seguramente lo habría notado.
En primera instancia, ambas Kay y Lorna han sido equipadas con herraduras. Sin embargo, a causa de que Glenn ha estado preocupado por la condición de Tisalia y ha visto únicamente sus documentos, notar que no habían registros relacionados a la colocación de un calzado habría sido difícil.
Glenn preparó la espada.
«Ahora, Señorita Tisalia»
Dijo él.
«Déjeme ponerle sus herraduras. Con solo este pequeño cambio, sus movimientos durante los encuentros deberían mejorar notablemente»
«N-no, así está bien»
Dijo Tisalia
«No hay necesidad»
Era exactamente la respuesta que él estaba esperando, lo cual probaba que las suposiciones de Glenn eran correctas.
«S-Soy la princesa del Clan Scythia. Mi precioso cuerpo, otorgado a mí por mis ancestros. Incluso si solo es la punta de mis pezuñas, dañarlos sin necesidad está fuera de cuestión!»
«Lo lamento, Señorita Tisalia»
Viendo la expresión pálida de ella, Glenn solo podía disculparse. Sin su conocimiento, Kay y Lorna aparecieron a sus lados y retuvieron sus brazos.
Parecía que Tisalia no había notado su presencia hasta que ya estaban sobre ella. Las doncellas eran también guerreras después de todo.
«U-ustedes…»
Dijo Tisalia.
«Ya hemos hablando con ambas acerca del calzado de hoy, hemos recibido el pago apropiado por nuestros servicios»
Dijo Glenn.
«La Señorita Kay y la Señorita Lorna nos pidieron hacer esto por todos los medios posibles»
Glenn les preguntó a las compañeras si su mala racha podría deberse a su falta de herraduras, ellas afirmaron su teoría. Ambas le pidieron a Glenn que se las pusiera si podía.
Él ya había recibido el pago para el servicio y el artesano necesario estaba listo esperando a sus espaldas.
También, sosteniendo un par de colosales tenazas, estaba Sapphe.
A su lado con varios instrumentos preparados estaba el artesano del taller Kuklo, un gran establecimiento que era uno de los orgullos de Lindworm.
A primera vista, ellos parecían no ser más que un grupo robusto de monstros de un ojo, ciclopes, pero contrario a su apariencia, eran excelentes artesanos muy habilidosos en trabajos delicados.
Glenn había convencido al artesano de un ojo del taller Kuklo de antemano, organizando todo para que pudieran poner forzosamente las herraduras en Tisalia después de atraparla durante el entrenamiento.
«Entonces, Señorita Tisalia, permítanos empezar»
Dijo Glenn.
«E-eeep…»
La princesa se quejaba. Sus ojos ya estaban húmedos. Era fácil ver que ella odiaba ser calzada.
Glenn conocía muy bien al tipo de personas que hacían esa cara. Como doctor, era algo familiar para él. En otras palabras, su expresión era justo como la de un niño, temblando de miedo a la vista de las herramientas necesarias para el tratamiento.
Ahora que pensó al respecto, los utensilios que había traído era un poco aterradores. Ellos incluyeron una hoja gigante parecida a una guadaña, un par de tenazas de metal, clavos y su respectivo martillo de hierro.
También había un numero de grandes herramientas de acero, vulgares y suficientemente tenebrosas, como para ser confundidas con herramientas de tortura.
«N-No puedo estar tranquila! Es aterrador!»
Dijo Tisalia.
«Mi Señora!»
«No digas cosas tan infantiles!»
Gritando y forcejeando con lágrimas en sus ojos, Tisalia ya había sucumbido al miedo y perdió su orgullo como princesa.
Trató de zafarse del agarre de Kay y Lorna. Su fobia extrema ha sido la razón del porque no tenía herraduras en primer lugar.
Sosteniendo una larga espada, Glenn se acercó a Tisalia, enfáticamente infantil en su odiado procedimiento.
«No te preocupes»
Le aseguró.
«Terminará rápido. Si no se mueve, no dolerá en absoluto»
«N-Noooooooo!»
Los lamentos de la orgullosa princesa guerrera hicieron eco a través de los abiertos terrenos de práctica.
* * *
Tisalia estaba aterrorizada por el dolor, pero en realidad, el trabajo de un experimentado herrador significaba que el paciente no sentiría ningún dolor en absoluto.
Había un cierto número de especies que usan herraduras, incluso Glenn estaba generalmente bien versado en la técnica requerida, era una habilidad que debía aprenderse pronto cuando se realizan tratamientos a monstruos.
Incluso siendo ese el caso, parecía que la razón por la cual Tisalia permanecía con ojos húmedos era porque entendía muy bien lo que significaba exactamente ponerse un calzado.
«Este es un inapropiado comportamiento… que insolente el ponerse entre las piernas de una mujer!»
Dijo ella.
«Ya no estoy cualificada para ser una esposa! Madre… Padre… por favor perdóneme por ser incapaz de darles un heredero!»
«Todavía puede ser una esposa»
Dijo Glenn.
«Esto es solo tratamiento médico después de todo»
En primer lugar, él se deslizó entre las piernas de Tisalia. Ya sea que fuese un centauro o no, no había una mujer que estuviera cómoda con un hombre colándose entre sus piernas de esa manera.
Tisalia cubrió su rostro con las manos mientras el empezaba.
Dobló su pata frontal izquierda. Comprobando la punta de su pezuña, Glenn encontró que tenía razón, habían crecido bastante. Primero, necesitaba cortarlo a una longitud normal, para ese propósito tomó la hoja en forma de hoz… conocida como cuchillo para cortar pezuñas y lo ajustó a la forma de la pata.
Cuando la hoja toco la punta, Tisalia se estremeció en sorpresa.
«Nh…ah, um, Doctor… Esa es una zona sensible, sea gentil, ok?»
«No te preocupes, estoy acostumbrado a hacer esto»
«Hnh…»
El sentimiento era parecido al de cortar las uñas de alguien más.
No había ningún dolor al recortar el final de la pezuña, aunque al fondo había una concentración de nervios. Cortarlo demasiado podía herirlos y causar un intenso dolor.
«Ang… ooh! N-no puedo soportarlo!»
«L-le está doliendo?!
Preguntó Glenn.
«H-hace cosquillas, apúrese! termine de una vez!»
Tisalia lo miraba con ojos llorosos, él no estaba seguro si sus mejillas rojas eran porque estaba avergonzada, o por alguna otra razón.
En efecto, sus reacciones empezaron a ser embarazosas para Glenn también. Él tenía que recordarse a sí mismo que era solo tratamiento médico… nada más que tratamiento médico.
Típicamente, después de cortar las pezuñas, procedía a ajustarlas más minuciosamente. No solo usaba el cuchillo, también usaba una lima para limpiar la punta y remover cualquier cosa que se haya encajado.
«Eek!»
Tisalia se estremeció nuevamente. Tanto el trabajo de Glenn como el trabajo que hacia el ciclope junto a él debieron llegar a su vista.
El hombre de un ojo estaba a la mitad del proceso de hacer sus herraduras, era un poco sencillo: Primero, la curvada herramienta de hierro era colocada en un horno especial para calentarse. Entonces, al terminar, los zapatos eran colocados en las pezuñas recortadas para hacer los ajustes finales.
El final de los cascos eran como uñas. Recortarlas y ponerlas en calientes herraduras no causaba ninguna herida al centauro.
Aun así, pocas personas serían capaces de ver pasivamente un pedazo de hierro ardiente aproximarse hacia su cuerpo.
«No me va a quemar, cierto?!»
Tisalia preguntó.
«Es seguro, cierto?!»
«Mi señora!»
«Por favor quédese quieta!»
Tisalia seguramente sabía que estaba muy caliente y no podía calmar su miedo. Ella miraba el ardiente pedazo de hierro, mientras su cara sufría espasmos.
Glenn tenía una buena relación de trabajo con los ciclopes del taller Kuklo.
Ya sea por agujas, pinzas o escalpelos necesarios para cirugías, cosas como estetoscopios que requerían un difícil proceso de fabricación, los artesanos de un ojo del taller Kuklo tenían la habilidad de hacer cualquier cosa para él.
Para ellos, ajuste de herraduras era algo simple, un trabajo sencillo.
Ellos presionaron el objeto contra la pezuña varias veces, por cada vez se hacían precisos ajustes a su forma. Una vez que el ajuste había terminado, era momento de fijar el calzado a sus piernas.
«H-hmph, D-deme con todo lo que tenga! Una princesa del clan Scythia no tiene nada que temer!
Tisalia empezaba gradualmente a caer en desesperación.
«Ok, entonces»
«Eek!»
Aunque parecía que había reunido toda la valentía que tenía, la cara de Tisalia temblaba de miedo otra vez.
Glenn tomó los clavos y el martillo para fijarlo en la pezuña. La herradura seria instalada con 6 clavos.
Un inexperto herrero en el trabajo, podría causar daños a los nervios causando lesiones, pero Glenn había pasado el punto de su carrera donde cometía este tipo de errores.
«O-odio esto! No puedo soportarlo más!»
Lloraba Tisalia.
«Mi señora!»
«Esto es completamente diferente de lo que acaba de decir!»
Parecía que ella había alcanzado el límite de su tolerancia. Tisalia empezó a forcejear violentamente y sin vergüenza.
En su pie, la cabeza de Glenn se sacudió ante la fuerte pisada de sus cascos. Con ella luchando, era imposible que el calzado continuara.
En efecto, como una luchadora en la arena Tisalia habría enfrentado a una multitud de oponentes sin dudarlo. Aunque usaran armas de madera, peleaban seriamente entre sí como si fuera un campo de batalla y con ello venia un cierto grado de riesgo.
Glenn se preguntaba por la tolerancia de alguien que estaba bien con un encuentro en la arena, pero no podía soportar colocarse unas herraduras.
«Señorita Tisalia, todo estará bien!»
Dijo él.
«No duele en absoluto!»
«Aun así! Intentaste agredirme, cierto?! Clavos… que barbárico!»
«Son necesarios para fijar las herraduras!»
Protestó él.
«Completamente incivilizado! Es capaz de hacerme algo como eso?! Alguien! Quien sea!»
«Hnk!»
Dijo una de sus asistentes.
«Mi señora…! Por favor… deje de resistirse!»
Se quejaba la otra.
Su forcejeo era tan furioso que parecía que iba a librarse de Kay y Lorna.
No había nada peligroso en el proceso de calzado. Sin embargo, si las herramientas y el acero caliente no eran manejados apropiadamente, eran capaces de causar graves heridas. Era posible que los movimientos de Tisalia pudieran lesionarla.
Glenn se preguntaba que podía hacer al respecto de la situación y sabía que no había nada que hacer excepto retenerla físicamente con una soga.
Justo cuando llegó a esa conclusión, algo como un látigo paso por alto y se enrolló alrededor de Tisalia.
«Hnh?! Augh! Ungh?!»
«Se ha vuelto un poco ruidosa, Señorita Tisalia»
Era Sapphe.
A pesar de su gran forma de centauro, la larga cola de Sapphe se enroscó en su cuerpo y la retuvo con remarcable facilidad, de la misma forma ella había apretado el cuerpo de Glenn cuidadosamente la noche anterior.
Las grandes serpientes se esconden en el denso bosque y a veces incluso comen caballos enteros.
Glenn pensó eso, Era la vista de la blanca cola de serpiente de Sapphe envuelta a través de la piel negra de Tisalia que sirvió de detonador para generar esa idea en su mente.
Retener a sus pacientes era una parte importante en el proceso del tratamiento…. Aunque Glenn tenía dificultades averiguando por qué Sapphe introdujo el final de su cola dentro de la boca de Tisalia.

«Gugh! Hngugh!»
«Parece como si mi cola fuera a ser devorada»
Dijo Sapphe.
«Por favor trabaje rápido, Dr. Glenn»
«Ungh! Gugmufngh!»
Tisalia parecía decir algo, pero Glenn no podía entender qué.
Más allá de eso, el incómodo movimiento de su boca empapaba la cola de Sapphe con saliva, incluso se escurría hacia su gran pecho.
Si Glenn fuese honesto, la escena frente a él le recordó algo completamente… algo completamente no relacionado con ningún tratamiento médico.
Tisalia continuó sacudiendo su cuello en protesta, a medida que su saliva caía desde su boca.
«Mhugnh! Fnugh!»
Pensando en que alguien podría tener la idea equivocada si vieran esa situación, Glenn rápidamente se concentró en su trabajo.
Con los 6 puntos de su pie ajustados con clavos, la labor de Glenn en la primera pezuña se había completado.
Así también, estaba el proceso de calzado para esa pezuña… protegiendo el crecimiento natural con una pezuña de hierro. Era un proceso poco diferente del calzado de un caballo, ya que las piernas de un centauro eran parecidas a las de un equino naturalmente.
Mientras que era un trabajo peligroso, un herradero bien versado en su trabajo podía completar el proceso sin causar ningún dolor al paciente. Esto era lo más cierto para un doctor con la habilidad de Glenn.
«Haa… Haa.. H-ha…»
Tisalia atrapó su aliento ahora que todo había acabado. Parecía que tener la punta de la cola de Sapphe en su boca había sido considerablemente difícil para ella.
Su cara seguía roja.
Nunca ir fácil con alguien, Sapphe fingía ignorancia al sufrimiento de Tisalia.
«Haa, haa… A-ahora, se acabó?»
Tisalia jadeaba.
«No, la siguiente es la pierna derecha»
«No… puedo soportarlo… mas… no tengo… el poder para ello»
«Por favor aguante un poco más. Estará listo pronto»
Tisalia había perdido su energía para seguir forcejeando, así que Glenn la consoló y continuó con su trabajo.
* * *
Unos pocos días pasaron.
Glenn y Sapphe estaban visitando la arena otra vez.
Sin embargo, esta ocasión no era por asuntos médicos. Como agradecimiento del tratamiento que le proporcionaron, Tisalia había preparado personalmente entradas para poder ver su encuentro en la arena.
Sus asientos eran de primera clase, con la mejor vista de la acción. Glenn se preguntaba cuanto exactamente le habría costado comprar esos tickets por su cuenta. El hecho de que Tisalia le había conseguido tales asientos significaba claramente que tan agradecida estaba con él.
El combate estaba a punto de iniciar. La princesa estaba en el medio de la arena, en silencio, mirando hacia abajo. Parecía estar en medio de la preparación mental para lo que venía.
«Sí que trabajó duro, Dr. Glenn»
Dijo Sapphe.
«Oh si… es cierto, fue un tanto agotador»
Ponerle las herraduras a Tisalia mientras ella forcejeaba no fue para nada un normal y simple trabajo. Habría sido casi imposible para Glenn hacerlo por su cuenta.
Kay, Lorna, Sapphe y el artesano del Taller Kuklo… Solo fue posible gracias al apoyo que le habían prestado.
«Pero esa octo-muje… digo la Dra. Cthulhy, parece estar volviéndose senil. Si sabía que la señorita Tisalia no tenía puestas unas herraduras, habría sido mucho más fácil para ella hacer ese trabajo. Con esas ocho piernas que tiene, seguramente habría podido poner al forcejeo de Tisalia en jaque»
«Imagino que la Dra. Cthulhy pensó que no era buena idea interferir demasiado»
Dijo Glenn.
«…Que quiere decir?»
Dijo Sapphe.
Esencialmente, Glenn pensó que su maestra no quiso involucrarse. No era propio que Cthulhy pasara por alto la causa de la mala racha de Tisalia durante sus chequeos regulares. Eso significa que, en última instancia, Cthulhy decidió esperar hasta que se le pidiera hacerlo por el paciente o su familia, de lo contrario el tratamiento no era necesario.
Así fue mayormente como fueron las cosas.
El paciente estaba en contra de eso, así que Cthulhy no lo hizo.
Aun así, para Glenn, habría sido más fácil encargarse si al menos hubiera escrito esa información en los archivos de Tisalia. De cualquier forma, no era bueno que los doctores se involucraran e interfirieran en todo.
Considerando la personalidad de su maestra, parecía seguir ese razonamiento. Para ella, no había necesidad de tratar a un paciente que no quiere ser tratado, Glenn sentía que probablemente haya algo de cierto en eso.
En la arena, Tisalia confrontaría a su oponente. Ya no usaba la armadura ligera que tenía en los terrenos de práctica. Ahora, Tenía un casco y una mejor armadura alrededor de su pecho.
Esa era la armadura de Tisalia, como se veía en su forma natural.
Glenn no podía ver su rostro, pero sentía en ella un aura majestuosa que alcanzaba su asiento.
El continuó hablando.
«Después de todo, si un luchador se enferma o se lesiona, no puede aparecer en más encuentros, cierto? Eso obviamente no sería bueno para ellos, así que pienso que la Dra. Cthulhy solo les daba el mínimo consejo necesario»
«Si, pero esta situación era diferente. La señorita Tisalia estaba realmente en problemas por su mala condición… y existía el riesgo de que al no colocarle unas herraduras podría haber desembocado en una lesión más grave al final»
La batalla comenzó. El oponente de Tisalia era un hombre lagarto, un tipo de monstruo que, como su nombre lo indica, parecía la mezcla entre un hombre y un lagarto.
Sus movimientos eran veloces y agiles. Sin embargo, libre de usar su cuerpo de equino, Tisalia golpeó sus pezuñas a través del terreno, causando un sonido claro en forma de tono musical ascendente a medida que se movía.
Al escuchar ese sonido, Glenn supo que las herraduras que había puesto en Tisalia verdaderamente le habían funcionado.
«Es cierto, ciertamente no queremos más lesiones»
Glenn estuvo de acuerdo.
«En ese caso…»
«Estaría bien si nos convertimos en unos doctores más entrometidos, ¿cierto?
Dijo él.
«No tenemos que imitar todo lo que haga la Dra. Cthulhy… podemos hacer las cosas a nuestra manera»
Si, a su propia manera… de la misma forma en la que manejaron el tratamiento de Tisalia.
Mientras que los propios deseos de Tisalia eran importantes, ellos también debían tener en cuenta los sentimientos de Kay y Lorna, quienes estaban preocupadas por ella.
Probablemente era necesario que Glenn y Sapphe fueran tan perspicaces como lo era Cthulhy, pero aun así, el creía que podía conseguir un mejor balance si se involucraba un poco más.
La multitud rugía. Cargando con una gran lanza, Tisalia le propinó un fuerte golpe al hombre lagarto. Su oponente cayó sobre sus rodillas. Trataba de levantarse con su espada, pero el golpe, el cual había atrapado con el centro de su cuerpo, parecía ser serio y era incapaz de regresar sobre sus pies rápidamente.
El combate estaba decidido. No había signos de preocupación de una pobre actuación por parte de la princesa.
De pie estaba la guerrera del clan Scythia, una eminencia en nombre y acciones. Incluso la fría asistenta de Glenn estaba sonriendo mientras veía a Tisalia y dijo.
«Parece que vuelve a estar en buena forma»
Glenn estaba seguro de que, a su propia manera, Sapphe estaba preocupada por Tisalia. No había duda de que no se llevaban bien entre ellas, pero a pesar de eso, Glenn entendía la amabilidad de Sapphe, una amabilidad que pensaba la hacía lucir como una doctora.
Con el encuentro acabado, Tisalia se quitó su casco. Limpiando el sudor de su frente, buscó los ojos de Glenn.
El y Sapphe estaban en los asientos más altos de la arena. Ser capaz de ver claramente la acción que sucedía allá abajo significaba que los luchadores podían verlos claramente también.
Encontrando la mirada de Glenn, Tisalia lo saludó con su mano, una gran sonrisa se mostró a través de su rostro.
Su cara estaba un poco roja, quizás por la alegría de haber ganado. Ella tenía un carisma bastante atractivo, sosteniendo su casco bajo su brazo y saltando por toda la arena. Glenn podía ver porque tenía tantos fans entre el público.
Él le regresó ligeramente el saludo.
«Doctor»
Dijo ella.
Levantando ambos brazos, Tisalia no dejó de hacerse querer por el público. Incluso cuando sus orejas temblaban encima de su cabeza, se estaba expresando con todo su cuerpo.
Una cola de serpiente se abrió camino alrededor de la mano de Glenn y saludó de vuelta a la exaltada Tisalia. La envoltura de escamas de serpiente eran un fresco sentimiento placentero.
«Seguramente no tiene ningún plan actualmente para mantener una entrevista de matrimonio con la señorita Tisalia, cierto?»
Preguntó Sapphe
«Claro que no… no te preocupes…»
Dijo Glenn.
«Me pregunto…»
Mirando los ojos rojos de Sapphe, era claro que tenía una mala cara. Glenn sabía que las cosas se iban a poner difíciles hasta que regresaran a la clínica y lo que el mal temperamento de Sapphe era capaz de hacer.
Tisalia seguía agitando su mano.
Su cara sonriente, agradecida como un centauro que finalmente pudo recobrar su honor. Sin embargo, dado que Glenn obviamente no estaba al tanto de los sentimientos de Tisalia, no terminaba de comprender porque ella estaba tan agradecida con él.
Sus nuevas pezuñas con herradura sonaban en la tierra árida cada vez que saltaba, sonada un fuerte eco a través de la arena.
Se decía que una herradura era un signo de buena suerte.
Triunfando sobre su temor y desagrado, Tisalia Scythia ahora podía enfrentar cualquier tipo de encuentro o dificultad y pararse firmemente en el camino de la prosperidad, aunque todavía le quedaba un largo trayecto por recorrer, por supuesto.
Traducido por: NonVoice – Patreon
Gracias por el cap!
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